Actividades para enseñarles a los niños los frutos del Espíritu Santo

Los niños con frecuencia aprenden acerca de los frutos del Espíritu Santo en la escuela dominical.

Thomas Northcut/Photodisc/Getty Images

La Biblia es la guía de un cristiano a la vida que comprende la historia, las reglas de conducta y las palabras de aliento y consuelo. Gálatas 5 resume las características que deben estar presentes en la vida de una persona si está sirviendo al Señor. Estas características, conocidas como fruto del Espíritu Santo, son amor, gozo, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio propio. Es importante para los niños aprender y comprender estas características a una edad temprana. Este conocimiento no sólo les dará una indicación de los rasgos positivos que deben buscar en otras personas, sino también les da los objetivos y la estructura de lo que los frutos deben soportar. Usa estas actividades para enseñar a los niños sobre los frutos del Espíritu Santo.

Juegos de los frutos del Espíritu Santo

Crea un laberinto de papel donde el niño debe guiar el lápiz desde el principio del laberinto hasta el final. Coloca palabras que denoten atributos de los fruto del Espíritu Santo escritos a lo largo de la vía y diles a los niños que deben encontrar su camino a través del laberinto siguiendo las palabras de los atributos en el orden en que aparecen en la Biblia (el laberinto se creará de esta manera), y que no pueden cruzar las líneas. Los crucigramas y búsquedas de palabras también se pueden crear con este tema. Como alternativa, pide a cada niño que silenciosamente elija uno de los frutos del Espíritu Santo. Un niño se encuentra en medio de un círculo de estudiantes sentados y dice en voz alta un atributo. Cualquier estudiante sentado que eligió ese rasgo en particular debe levantarse de su silla y tratar de encontrar una silla vacía, mientras que el niño que estaba de pie en el centro busca una silla vacía también. No hay ganadores ni perdedores, el juego termina cuando el profesor o un adulto decide ponerle fin.

Manualidades de los frutos del Espíritu Santo

Usa actividades prácticas que ayuden a los niños a recordar y comprender los nueve atributos cristianos. Dibuja y corta un árbol de papel de construcción. Un tronco de papel marrón y una parte superior verde se ven bien en un fondo azul claro. Que los niños más pequeños hagan un dibujo pequeño y sencillo que represente un fruto del Espíritu para ellos. Por ejemplo, para el amor, el niño puede dibujar un corazón alegre, puede dibujar una cara sonriente. Corta y pega cada una de estas imágenes en el árbol como si fueran frutos que crecen en el árbol. Los niños mayores pueden dibujar un árbol con fruta real en él. Pídeles que describan cómo un fruto particular del Espíritu es similar a una fruta natural en específico. Por ejemplo, un estudiante puede hacer un dibujo de una fresa, y representar con ella el "amor", ya que es de color rojo y con forma de corazón. Un plátano puede ser el fruto que se elija para representar "alegría" porque el amarillo es un color alegre y tiene forma de sonrisa.

Dramatizaciones de los frutos del espíritu

Participar en representaciones teatrales puede enseñar mucho a los niños. No sólo se requiere que los participantes memoricen las líneas, sino también pueden estar implicados en la creación de elementos visuales, tales como accesorios y el diseño en conjunto. Producir una obra de teatro sobre el fruto del Espíritu Santo se puede llevar a cabo durante el servicio de adoración. Los jóvenes estudiantes pueden usar trajes que recuerden la fruta o vestir camisetas con los colores de la frutas. El narrador puede leer la escritura de Gálatas sobre los atributos del fruto del Espíritu Santo y los niños pueden decir, al unísono, las características específicas, como el amor o la alegría, cuando el narrador indique hacerlo. Por otra parte, crear una obra de teatro de títeres con los atributos cristianos, con títeres de dedo de papel colocados alrededor de la base de los dedos, y un escenario improvisado con una caja de zapatos.

Otras actividades

Dales a los niños semillas y dáselas para sembrar. Explícales que al aprender acerca de Dios, leer la Biblia y tratar de vivir una vida que agrade a Cristo, el Espíritu Santo planta la semilla de la alegría y de la felicidad y otras frutas en su vida. Permíteles a los niños observar el lento proceso que se necesita para cultivar semillas y hazles saber que lo mismo pasa con los frutos espirituales, que no nacen durante la noche. Ayuda a los niños a cuidar sus semillas y hazles saber que al igual que las semillas necesitan tierra, el agua y la luz solar para crecer y florecer, sus semillas espirituales necesitan ser alimentadas. Enséñales a los niños necesitan orar, leer la Biblia y escuchar a Dios para llegar a ser cristianos adultos. La discusión abierta y honesta sobre el fruto del Espíritu Santo es otra forma de ayudar a los estudiantes a entender el concepto. Usa ejemplos reales de personas que muestran ciertos atributos cristianos para ilustrar el tema. Por ejemplo, si un estudiante le sostiene la puerta a un compañero de clase detrás de él, di que el estudiante muestra amabilidad.

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