Aprenda a enviar chocolate por correspondencia

Escrito por Nancy Lovering ; última actualización: February 01, 2018
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Una de las cosas que dificulta el envío de chocolate por correspondencia es el hecho de que se puede derretir. Puedes evitar este problema si envías chocolate que ya esté derretido por ejemplo en forma de salsa o chocolate como ingrediente de alguna receta que no se derrita, como brownies. Si envías chocolate sólido en días de clima frío las posibilidades de que dejen tu paquete al sol son menores. Si tienes que mandar chocolate durante una época del año calurosa, puedes seguir algunos pasos para reducir las posibilidades de que se derrita.

En primer lugar, puedes congelar el chocolate. Si está congelado cuando lo envíes, va a tardar más en derretirse ya que primero tiene que descongelarse. La textura y apariencia del chocolate puede cambiar cuando está congelado (debido a la separación del azúcar y de la grasa), así que ten en cuenta esto cuando decidas si vas a congelarlo. En el caso de que decidas hacerlo, anteriormente deberás asegurarte de enfriarlo durante 24 en el refrigerador y cerrarlo al vacío para deshacerte del exceso de aire. La exposición al aire y los cambios repentinos de temperatura son dos factores que pueden alterar la apariencia del chocolate cuando se congela, así que asegúrate de evitar estas condiciones.

Envía el chocolate a principios de la semana para evitar que pase tiempo en las instalaciones a donde se procesa la correspondencia durante los días en los que no se realizan entregas. Cuanto más rápido llegue el paquete a destino, menos probable será que pase tiempo guardado en un lugar que tenga temperaturas altas.

Prepara la caja para el envío. Forra la caja con papel aluminio. Esto servirá para que los rayos del sol o calor que entren en contacto con tu paquete se reflejen. Luego, pon una capa de papel de burbujas del lado de adentro de la caja. Las burbujas de aire funcionan como aislante para que el interior del paquete se mantenga frío. Utiliza hielo-packs congelados para la siguiente capa. La idea es que el chocolate esté lo más cerca posible a los paquetes de gel congelados y rodeados por el papel de burbujas para mantener el frío adentro y luego forras todo con papel aluminio para mantener el calor afuera. Si vas a envíar chocolate por correspondencia de manera frecuente, deberías considerar comprar papel de burbujas térmico Mylar con un diseño pensado específicamente para el envío de alimentos.

Prepara el chocolate. Envuélvelo para que no se condense por los paquetes de gel congelados y separa las capas con papel de cera. Si el chocolate se va a enviar junto con otros artículos, mételo en una bolsa con cierre para evitar que tome contacto con los otros artículos.

Sella y etiqueta tu caja. Cubre las puntas con cinta para que no se escape el frío. Con claridad marca la caja con etiquetas que digan "perecedero", "frágil", "este lado debe mirar hacia arriba" y "mantener refrigerado".

Invierte en un envío rápido. Algunas empresas de chocolate profesionales requieren que los envíos lleguen al día siguiente durante los meses más calurosos del año. Es posible que tengas que tener en cuenta alguna opción de envío que requiera firmas para que se realice la entrega, así tu paquete no queda al sol.

Avisale a quien vaya a recibirlo. Si la persona a quien le mandas el chocolate ya sabe que se lo enviarás, puede estar presente en el lugar de entrega cuando llegue el paquete. Incluso, hasta puede decirte cuál es la mejor dirección para que se haga la entrega, ya sea en su trabajo o en su casa, y hasta puede sugerirle al personal del servicio de entregas donde dejar el paquete.

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