Los tres reyes magos

Cuéntale a los niños la historia del nacimiento de Cristo y la escena de la natividad que comúnmente aparece en sketches, figuras y masas de Navidad. Utiliza los tres hombres sabios o tres reyes magos, como un ejemplo de fe para los niños. Describe los tres hombres sabios como hombres grandes y sabios de tierras lejanas. Dile a los niños cómo los tres hombres sabios habían visto la estrella en el cielo y sabían que Dios había hecho que algo muy importante y alegre ocurra. Describe cómo su fe los hizo tomar un largo viaje a Belén. Una vez que llegaron al establo de Belén y que la estrella estaba por encima, su fe fue recompensada cuando encontraron al niño Jesús que acababa de nacer.

Alimentó a las masas

Dile a los niños que cuando se tiene fe en Dios, Él siempre proveerá y cuidará de ti. Relaciona a los niños la historia de Jesús alimentando a la multitud de 5000 personas con sólo unos pocos panes y un par de pescados. Describe a los niños cómo los discípulos continuaron sirviendo a la gente pedazos de la comida, pero de alguna manera nunca se agotaba. Hábleles acerca de cómo cuando el pueblo se fue a casa y los discípulos fueron a recoger las sobras y migajas, tenían suficiente comida de sobra para llenar varias cestas. Explícales que a través de la fe que Jesús tenía en Dios, ellos fueron capaces de proporcionar el alimento para todo el pueblo.

El arca de Noé

Cuenta la historia de un hombre en el Antiguo Testamento de la Biblia, Noé, que era un hombre simple y ordinario hasta que Dios puso a prueba la fuerza de su fe. Explica a los niños que Dios le dijo a Noé que habría un gran diluvio que inundaría todo y que él debía construir un gran arca, o barco, para salvar a la humanidad y a todos los animales. Dile a los niños cómo Noé hizo lo que Dios le pidió, construyendo el arca, a pesar de las burlas e incredulidad de sus vecinos. Noé terminó el arca y la llenó con dos animales de cada especie. Después de que terminó vino un gran diluvio e inundó, como Dios le había dicho. Demuestra a los estudiantes cómo la fe de Noé en Dios lo salvó a él, a su familia y a todos los animales del mundo.

Abraham e Isaac

La historia de Abraham y su hijo Isaac demuestra el poder y la fuerza de la fe que Abraham tenía en Dios. Explica a los niños que Abraham y su esposa querían un niño y finalmente, Dios los bendijo con un hijo llamado Isaac, a quien amaban mucho. Cuéntale a los alumnos que después Dios le pidió a Abraham que renunciara a su hijo. En la versión de la Biblia, Dios pide a Abraham que mate a su hijo como un sacrificio. La historia no tiene que ser transmitida a los niños pequeños en estos términos para que ellos entiendan el punto. En cambio diles que Dios le pidió que simplemente renuncie a Isaac. Justo cuando estaba a punto de entregar a Isaac, Dios lo detuvo. Diles que Dios estaba muy orgulloso de la fe de Abraham y que él realmente no tuvo que renunciar a su hijo. Todo el asunto era sólo una prueba de su fe.