Cómo limpiar piercings del ombligo

Es importante mantener el piercing del ombligo limpio, especialmente mientras está cicatrizándose. Pueden infectarse rápidamente si no se limpian con frecuencia. ¡Utiliza estos consejos para saber cómo y cuándo limpiar tu piercing!

Instrucciones

Limpiar un piercing del ombligo es un paso muy importante para asegurarte de que éste se cicatrizará adecuadamente. Necesitarás lavar no sólo la zona donde éste está ubicado, también el aro mientras lo tienes puesto.

No intentes limpiar el piercing el mismo día que te lo hiciste. La zona y el aro son desinfectados antes de la colocación. Los primeros días después de la perforación no debes tocar el piercing.

Deja que el agua de la ducha toque el aro, pero no permitas que fluya directamente sobre el piercing la primera semana. Asegúrate de que el agua llegue a la zona para enjuagar los restos de jabón y así poder mover el piercing.

Después de una semana, puedes comenzar a limpiarlo. Notarás que una cáscara se forma alrededor de los 2 orificios de tu piercing. Es una parte normal del proceso de cicatrización. Esta costra no es dolorosa, no sangra ni tiene pus. En caso de que lo tenga, es porque quizás tengas una infección y debas colocarte alguna pomada antibiótica. Si no cicatriza en algunos días, ve a un médico.

Una vez que tu ombligo haya cicatrizado, podrás comenzar a limpiar tu piercing mientras te duchas. Deja que el agua tibia fluya sobre él. Enjabona la zona suavemente y mueve el aro o la barra así éste se limpia. Asegúrate de enjuagar el área completamente.

Después de la ducha, seca el piercing con hisopos de algodón. Evita que éste se mueva fuera de la ducha hasta que esté completamente cicatrizado. Este tipo de perforaciones pueden tardar entre 3 meses a 1 año en cicatrizar. No querrás generar una infección accidentalmente.

Después de hacer ejercicio o transpirar demasiado, asegúrate de lavar la zona el piercing con agua tibia enjabonada, y luego enjuagar.

eHow en espanol
×