Los compresores de aire Husky pueden ser herramientas de gran utilidad. Un compresor facilita el uso de las herramientas de aire como clavadoras neumáticas y engrapadoras. La ventaja de utilizar aire en lugar de electricidad para accionar herramientas es que el peso de las mismas se reduce ya que no hay motor y no genera calor. También suele haber más ajustes de torque. Entre los problemas que pueden existir con los compresores se incluyen la falta de funcionamiento y la baja producción.

Asegúrate de que el compresor de aire Husky esté conectado a la fuente principal de energía eléctrica si no funciona. Si utilizas un cable de extensión, asegúrate de que sea grueso. Si el tanque está lleno de aire, el compresor no funcionará. Sólo funcionará cuando la presión del tanque baje a la presión de fluidez.

Comprueba que los fusibles o interruptores automáticos no hayan saltado en el panel de corriente doméstica. Reemplaza los fusibles y deshazte de interruptores de circuito quemados.

Verifica que el circuito en el que estés utilizando el compresor de aire Husky pueda manejar la potencia necesaria. Por regla general, los requisitos de amperaje pueden ser de entre 20 y 50 amperios. Los compresores de aire de una sola etapa pueden necesitar de 20 a 30 amperios y los de dos etapas pueden necesitar de 40 a 50 amperios.

Lleva el compresor a un área bien ventilada si el protector de sobrecarga térmica se corta repetidamente o si el compresor de aire se está calentando demasiado.

Comprueba si hay conexiones sueltas con una mezcla de agua y jabón. Sólo cepilla con agua jabonosa sobre todas las conexiones y fíjate si hay burbujas. Ajusta las conexiones flojas.

Aplica cinta de sellado de roscas a los accesorios si al apretar las conexiones flojas no solucionas una baja salida de aire. Desarma los accesorios y envuelve con cinta adhesiva.