Los orígenes del comportamiento poco ético

En el debate de las causas del comportamiento poco ético, las trampas psicológicas son las que originan estas conductas, así lo establecen Robert Hoyk y Paul Hersey en un artículo para "Graziadio Business Review" de la Universidad de Pepperdine. En un artículo titulado "Los orígenes del comportamiento poco ético", ellos identifican tres tipos generales de trampas psicológicas. La primera se basa en la obediencia a la autoridad. Las trampas de la personalidad se centran en las características personales que hacen que una persona sea vulnerable al mal comportamiento, como la necesidad compulsiva por un desenlace, lo que conduce a demandar respuestas definitivas, incluso cuando no las hay. Por último, las trampas defensivas hacen que las personas busquen el modo más sencillo de arreglar una situación luego de cometer un error.

Directivos y empleados que traspasan los límites

Más allá de que se trate de un directivo demasiado entusiasta que presione a sus empleados para contentar a sus superiores o de un ávido empleado que intenta superar a sus compañeros tomando atajos para obtener la atención de su jefe, los resultados siempre son malos. La falta de ética por parte de directivos puede tener un impacto duradero sobre los empleados, como cuando pierden sus empleos o enfrentan reducciones salariales. Los empleados que eluden los estándares de seguridad para mejorar su rendimiento corren el riesgo de poner en peligro sus propias vidas y las de terceros.

La presión en el desempeño

Según una presentación de Business and Legal Resources (BLR) denominada "Ética empresarial: lo que los empleados deben saber", los comportamientos poco éticos en el lugar de trabajo a menudo se originan en la permanente presión para superar o incrementar resultados. Otras presiones se generan a causa de plazos de entrega ajustados o de la demanda por parte de compañeros, clientes y proveedores. Los asuntos complejos también pueden crear presiones a causa de la falta de orientación al igual que las demandas que requieren soluciones inmediatas, lo que conduce a tomar malas decisiones en un momento de debilidad.

Pasos para controlar comportamientos poco éticos

Se ha vuelto común en las empresas redactar las políticas de comportamiento y solicitar su aprobación y firma por parte de cada uno empleados. El objetivo es eliminar las ambigüedades en lo que respecta a qué tipo de conductas se consideran poco éticas, a la vez que se informa a los empleados acerca de los pasos a seguir en caso de observar estos comportamientos en otras personas. Otro de los objetivos de estos documentos es prevenir las vacilaciones para denunciar actividades poco éticas.