¿De qué están hechos los clavos de metal?

Escrito por Shane Grey ; última actualización: February 01, 2018
Jupiterimages/Comstock/Getty Images

La composición y forma de los clavos, los cuales han sido una parte integral de la carpintería y la construcción en general, ha evolucionado para mejorar las viejas técnicas y adaptarse a nuevas aplicaciones. Por definición, los vástagos y cabezas de todos los clavos están compuestos de metal. Sin embargo, el tipo de metal de los recubrimientos protectores varían según la aplicación del clavo, particularmente el lugar de instalación del clavo, los materiales que el clavo debe sujetar y la fuerza requerida de sujeción. Al conocer sobre los clavos de metal y sus características, puedes elegir el tipo adecuado para tu proyecto de construcción.

Metales de manufactura

El acero es el metal de manufactura más común en los clavos de construcción. Los trabajadores de la construcción de todo tipo usan clavos de acero. Por ejemplo, los albañiles usan clavos de acero para construir formas de hormigón, los carpinteros para estructuras de armazón, los electricistas y los plomeros para instalar flejados y fijar cajas, y los techadores e instaladores de revestimientos para montar materiales de recubrimiento. Sin embargo, las aplicaciones especiales, como la construcción de botes o el trabajo con metal, emplean una variedad de metales alternativos, como acero inoxidable, aluminio, latón y cobre.

Recubrimientos de clavos

Aunque muchos clavos no tienen recubrimiento alguno, la mayoría de los clavos de metal en las tiendas de mejora para el hogar están recubiertos con compuestos lubricantes o protectores. Los clavos para armazón de carpintero a menudo están recubiertos con un lubricante de vinilo para facilitar una entrada rápida y suave. Por otro lado, los clavos para la construcción en exteriores, techado y revestimiento requieren recubrimientos para aumentar la resistencia a la corrosión. Los tipos de recubrimientos contra la corrosión más comunes son la inmersión en caliente y el electrogalvanizado. Ambos tipos de recubrimientos aplican una capa de zinc resistente a la corrosión al vástago y la cabeza del clavo.

Tipos de clavos

La forma, longitud y forma de los clavos varía según su aplicación. Por ejemplo, los clavos delgados sin cabeza fijan piezas especiales a las superficies en interiores. Las cabezas de los clavos de acabado se sientan al ras, debajo de la superficie de la moldura, para crear una apariencia elegante y suave. Por otro lado, los clavos de techado tienen cabezas planas y grandes que incrementan su agarre y resistencia contra las corrientes de viento. Casi todos los tipos de clavos están disponibles en un amplio rango de largos. Usualmente son ofrecidos en incrementos de 1/8 a 1/4 de pulgada (3,2 a 6,4 mm). El tipo adecuado de clavo para un trabajo en particular depende del grosor de los componentes que el clavo debe unir.

Clavos especiales

Los diseños únicos de los clavos especiales mejoran su apariencia o funcionalidad. Los ejemplos de clavos especiales decorativos incluyen aquellos con cabeza cortada, los cuales emulan los clavos forjados a mano de la fragua de un herrero, y los tacos de mobiliario, que cuentan con cabezas coloreadas y acabados de calidad. Los diseños de clavos especiales que incrementan la funcionalidad, incluyen los clavos con vástago en anillo y en espiral. A menudo son usados para construir artículos de uso rudo, tal como tarimas de envío. Sus ranuras incrementan el poder de fijación de estos clavos.

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