Efectos secundarios de la cinarizina

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La cinarizina se emplea para el tratamiento del vértigo y los mareos.
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La cinarizina es uno de los medicamentos más indicados para tratar nauseas y vértigo, así como también la cinetosis y enfermedad de Ménière. Además, se puede indicar para calmar los dolores de cabeza tipo migrañas.

Este fármaco es un bloqueante de canales del calcio y antihistamínico derivado de la piperazina con efecto sedante, lo que se traduce por una acción antivasoconstrictora de las fibras musculares lisas de vasos cerebrales y periférico.

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Principales usos de la cinarizina

La cinarizina se indica para el tratamiento de la cinetosis, uno de los mareos más comunes, que se produce al viajar en automóvil, autobús, tren, metro, avión o, especialmente, en barco. También puede presentarse por el movimiento del campo visual como, por ejemplo, en un cine con pantalla gigante.

Este tipo de mareos se acompaña de síntomas como sudor frío, malestar general, malestares gástricos, dolor de cabeza, náuseas y vómitos. La frecuencia de las migrañas es un signo que puede marcar la frecuencia de la cinetosis.

La enfermedad de Ménière es otra de las patologías que encuentra tratamiento en la cinarizina. El National Institute of Deafness and Other Comunication Disorders (NIDCD) de los Estados Unidos define a este trastorno como una anomalía en el oído interno que causa mareos fuertes (vértigo), timbre o silbido en el oído (tinnitus), pérdida de audición y sensación de que el oído está lleno o congestionado.

Si bien se puede presentar a cualquier edad, la enfermedad de Ménière es más común en adultos entre 40 a 60 años de edad. Sólo en los Estados Unidos se calcula que existen cerca de 615.000 personas diagnosticadas con esta patología.

El vértigo postural paroxístico benigno es otra afección del oído interno que puede ser tratada con cinarizina, en conjunto con la Maniobra de Epley, para una solución a este problema.

Los efectos vasodilatadores y antihistamínicos de este medicamento hacen que en algunos países se lo indique para el tratamiento de arterioesclerosis, trombosis, o hemorragia subaracnoidea, ya que su acción permite una mejor circulación sanguínea en los vasos capilares.

Esta acción vasodilatadora de la cinarazina es también de gran utilidad para dolores de cabeza y migrañas, que están directamente relacionadas con la circulación sanguínea.

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¿Cómo debe administrarse?

La cinarizina se expende en cápsulas de 75 mg, sin necesidad de receta médica, es decir, que es de venta libre. No obstante, es indispensable la consulta al médico antes de tomar este medicamento, debido a sus interacciones, contraindicaciones y efectos adversos.

Por lo general, para todas las indicaciones se recomienda tomar una tableta cada 12 horas por vía oral.

Su uso en el embarazo no ha sido probado de manera adecuada, por lo que no se recomienda su administración en este período, salvo indicación específica del médico, en casos de que los beneficios terapéuticos justifican los riesgos potenciales para el feto.

Tampoco es recomendable su uso en el períodos de lactancia y en niños menores de cinco años.

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¿Cuáles son sus efectos secundarios?

Al ser un medicamento de venta libre, la seguridad de la cinarizina es muy alta y, por ende, sus efectos adversos no revisten una gravedad mayor. No obstante, conocerlos evitará potenciales riesgos, no sólo por el medicamento en sí mismo, sino también con su interacción con otros fármacos y acción en determinadas enfermedades preexistentes.

La Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de México describe que los principales efectos adversos de la cinarizina son:

  • Somnolencia: debido a su acción sedante, en algunos pacientes puede causar cansancio, aunque de manera muy leve y transitoria.
  • Trastornos gastro­intestinales: también suelen ser leves y pasajeros.

Menos frecuentemente pueden aparecer cefaleas, resequedad de boca, aumento de peso, transpiración, visión borrosa o reacciones alér­gicas. Mientras que raramente se podrán describir síntomas semejantes al lupus eritematoso y liquen ­plano.

En personas mayores, han sido descritos aparición o aumento de síntomas extrapiramidales, en algunos casos asociados con sentimientos depresivos, en cuyos casos deberá suspenderse el tratamiento de manera inmediata.

Si bien no son frecuentes las indicaciones de altas dosis de cinarizina, cuando el médico las indica por algún trastorno en particular, se debe tener alta precaución en pacientes con hipotensión, debido a la posibilidad de disminución de la presión sanguínea que provoca este fármaco.

Debido al riesgo de padecer cansancio con la administración de este medicamento, se deberá tener precaución al conducir y ante la utilización de maquinaria pesada.

Los principales riesgos de la sobredosis son somnolencia excesiva. En estos casos, es imperativa la visita al médico para realizar un lavado gástrico.

También se desaconseja el uso de alcohol, depresores del sistema nervioso central y antidepresivos tricíclicos mientras dure el tratamiento con cinarizina, ya que se puede ver potenciado el efecto sedante.

ADVERTENCIA: Este artículo no debe considerarse como un equivalente de una consulta médica profesional. Consulte a su médico de confianza ante cualquier duda sobre este u otro tema relacionado con su salud.

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