¿Cuáles son los peligros del óxido en las heridas?

Verificado

El óxido no sólo destruye el metal, puede causar infección y tétanos.
i Jupiterimages/Photos.com/Getty Images

La herrumbre es una sustancia escamosa llamada óxido férrico que corroe y destruye artículos de metal como resultado de la oxidación, especialmente en condiciones saladas o húmedas. El óxido por sí mismo no es peligroso pero si alguien pisa un clavo oxidado o se corta con un artículo oxidado, puede ser fatal. Una infección menor de la herida es la menor de las preocupaciones de la persona lastimada. La amenaza de tétanos o incluso gangrena es lo peor.

Cuidado apropiado de las heridas

Cualquier herida con óxido que no se cuide apropiadamente puede infectarse. Las heridas punzantes son particularmente vulnerables, porque es probable que dejen residuos de óxido en el tracto de la herida que puede no notarse que causa infección. A menudo el óxido actúa como lo haría una astilla de madera y sale de la piel. Otras veces permanece en la herida y continúa infectando. El cuidado apropiado después de una herida varía dependiendo del tamaño de la herida. Si es pequeña lavarla con jabón y tratarla con pomada antibacterial y un vendaje puede ser todo lo que necesita para curarse. Las heridas más grandes deben ser revisadas por un médico ya que pueden requerir desbridamiento (eliminación de polvo, óxido u otros contaminantes) o incluso suturas. Se requiere la asistencia de un médico si la persona herida no ha recibido una vacuna o un refuerzo contra el tétanos dentro de los últimos cinco años.

Infección simple por una herida con óxido

Una infección simple por una herida con óxido es evidente incluso para el observador casual. El tejido alrededor de la herida se pone rojo, se hincha y se inflama. El dolor incrementa y puede notarse la presencia de un fluido blanco espeso llamado pus. Algunos con una herida infectada mantendrán una temperatura de bajo grado y se sentirán fatigados. Una visita rápida al médico o a la sala de emergencias es necesaria. La herida deberá ser tratada de nuevo y se recetarán antibióticos orales al paciente. Las infecciones que no se tratan sólo empeorarán. En este punto, el médico sugerirá nuevamente una vacuna en contra del tétanos si el paciente no ha tenido una.

Infección grave de heridas con óxido

Una vez que una herida con óxido se ha infectado y no se ha tratado, la infección empeora. Una infección que se ignora producirá una fiebre alta, la producción de pus incrementa y va acompañada por un olor fétido. Los ganglios ninfáticos se hincharán y el dolor de la herida será casi insoportable. Una visita a la sala de emergencias es esencial ahora ya que el tratamiento con antibióticos orales de amplio espectro puede no funcionar. Incluso puede ser necesario que la persona herida sea hospitalizada y se inicie una terapia intravenosa de antibióticos. La herida necesitará mayor desbridamiento y puede requerir que se inserte un drenado para extraer la pus. Ignorar la infección sin buscar atención médica en última instancia resultará en la muerte del tejido, llamada gangrena. La gangrena es una complicación de una infección que no se controla que destruye el tejido. Además de la hospitalización y una terapia agresiva de antibióticos, puede requerirse una amputación probable de las áreas afectadas. Si la infección ha invadido la sangre, septicemia, una infección bacterial de sangre podría tener como resultado la muerte para la persona con la herida o punción con óxido.

Tétanos y heridas con óxido

A pesar de la creencia popular, casi cualquier punción o herida puede causar tétanos, pero éste a menudo está conectado a las heridas con óxido. El tétanos es una infección bacterial severa, causada por el Clostridium tetani que se introduce al cuerpo a través de una herida o punción. Los síntomas del tétanos pueden comenzar desde dos semanas hasta dos meses después de la herida con óxido. Estos síntomas incluyen dolor de cabeza y espasmos en los músculos de la mandíbula, lo que le da a la infección la designación de "mandíbula fija". A medida que la toxina se esparce a través del cuerpo rápidamente provoca espasmos en más músculos como el cuellos, las extremidades y el estómago. También puede causar convulsiones graves. Las personas que contraen tétanos usualmente necesitarán pasar varias semanas en el hospital ya que la recuperación es gradual. Las complicaciones del tétanos pueden ser graves e incluyen períodos prolongados de rigidez y dolor muscular, problemas en los pulmones y respiración, baja densidad ósea, embolismo pulmonar (coágulos en los pulmones), arritmia (ritmo cardíaco anormal), presión arterial alta, neumonía y posiblemente la muerte. El tétanos, que en algún momento estuvo muy extendido, ahora es raro ya que se creó una vacuna en 1940. En los Estados Unidos, la tasa de muerte por tétanos es de 3 por cada 10, en su mayoría en personas que no están inmunizadas. El tétanos continúa siendo común en países subdesarrollados que no tienen el cuidado médico adecuado.

Más reciente