Cómo cuidar un capullo de mariposa

Ver a una oruga convertirse en mariposa es una gran oportunidad para los niños de aprender acerca de la naturaleza de forma práctica. Cuidar un capullo de mariposa, también conocido como crisálida, no es difícil. De hecho, es muy poco lo que tienes que hacer para mantener un capullo en buen estado y que la metamorfosis ocurra. Si puedes encontrar un capullo de mariposa, colócalo en el interior y deja que tus hijos lo vean convertirse en uno de los insectos más hermosos de la naturaleza.

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Prepara un hábitat para la mariposa que saldrá del capullo. Cubre el fondo de la caja o del frasco con hojas y pon unas cuantas ramas dentro del contenedor.

Coloca el capullo dentro del contenedor en la rama donde la encontraste. No lo remuevas del lugar donde lo descubriste colgando. Si no puedes quitar la rama o palo de forma segura, busca una crisálida diferente.

Espera a que la mariposa salga. No hay nada que debas hacerle al capullo. No te sorprendas si se mueve y retuerce. Esto es normal.

Permite que la mariposa seque sus alas cuando salga. No la toques, ya que sus alas estarán en proceso de secado.

Dale a la mariposa un plato de agua azucarada para comer. Mantenla en el contenedor durante un par de días y luego déjala en libertad en la naturaleza.

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