Step 1

Dale a todas las begoñas la brillante luz del sol desde una ventana al este o al sur. Para las begoñas cultivadas por su follaje, como las rex, la luz no debe ser directa, sino que se debe filtrar con una cortina transparente o a la sombra de un árbol fuera de la ventana. Sin embargo, las de floración necesitan varias horas de luz solar directa al día.

Step 2

Proporciona una temperatura estable para begoñas. Son sensibles a las fluctuaciones rápidas de temperatura y por lo tanto deben mantenerse alejadas de corrientes de aire. Siempre y cuando la temperatura sea constante y por encima de 60 grados Fahrenheit (15. 5 grados centígrados), pueden prosperar.

Step 3

Riega las begoñas entre una vez por semana y una vez cada dos semanas. Debes tener cuidado de no regarlas demasiado porque mucha agua puede causar que la planta se eche a perder. Controla la humedad de la mezcla de tierra y cuando puedas meter el dedo en la tierra y no sentir la humedad, es tiempo de regar.

Step 4

Mantén las begoñas en macetas pequeñas. Tienen sistemas de raíces pequeñas y no necesitan trasplantarse con frecuencia. Sin embargo, cada primavera saca el cepellón de la maceta y comprueba si las raíces se han envuelto completamente alrededor del fondo de la maceta. De ser así, cámbiala a una maceta del siguiente tamaño.

Step 5

Mueve las begoñas que están floreciendo afuera durante los meses de primavera, verano y otoño si puedes crear las condiciones adecuadas para ellas. Las que están floreciendo disfrutan de un pórtico con sombra, siempre y cuando la temperatura no caigan por debajo de 60 grados Fahrenheit (15.5 grados centígrados). Las begoñas que crecen fuera sí necesitan un riego más frecuente, así que ten cuidado y verifica la tierra a menudo.