Qué debes hacer si eres expulsado como estudiante

Escrito por Tom Lutzenberger ; última actualización: February 01, 2018
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Si tuviste la desafortunada experiencia de ser expulsado como estudiante, no es el fin del mundo. Todavía puedes obtener una educación superior y licenciatura, sin embargo, tendrás que ser un poco más creativo y más aplicado en tus alternativas restantes.

Busca una segunda oportunidad

Muchas escuelas de pregrado en realidad no quieren tener en el registro que han expulsado a alguien. Ellos proporcionan la educación como un negocio y la pérdida de un estudiante, con la pérdida del ingreso viable que viene de los cuatro o cinco años durante los cuales el estudiante está matriculado. Si bien muchas escuelas cuentan con procesos de expulsión para mantener los estándares de rendimiento, también tienen un proceso de apelación. Si puedes convencer a la junta de revisión de apelación que se te debe dar una segunda oportunidad, podrás conseguir ser readmitido en un estado de libertad condicional que está muy controlado. Si eres expulsado, siempre debes comprobar para ver si existe esta opción en tu escuela particular. Muchos de los estudiantes que estuvieron en problemas su primer año fuera de casa pueden salvar su carrera de educación superior mediante esta opción.

Continúa tu educación y pruébate a ti mismo

Para los estudiantes universitarios expulsados en el primer año, continuar su educación en un colegio los ayuda a restablecerse académicamente y demuestra que pueden obtener buenas calificaciones. Aunque tengas una orden de expulsión en tu expediente, si también puedes mostrar un exitoso rendimiento posterior y buenas o excelentes calificaciones, entonces tendrás un argumento para ser readmitido.

Aprende un oficio

Hay muchas oportunidades de trabajo en las que puedes participar que no requieren un título universitario para empezar. Los oficios de habilidad (como técnicos de red, electricistas o la elaboración), las ventas y la construcción son sólo unos pocos, pero cada uno de ellos puede mostrar tu disciplina y, sobre todo, tu capacidad de recuperarte de una recesión. Unos pocos años de experiencia laboral sólida pueden rendir sus frutos sobre una nueva aplicación a la universidad. Reflejarán madurez y cómo has aprendido de tus errores anteriores, mejorando tus posibilidades de ser aceptado nuevamente.

Considera las Fuerzas Armadas

Si puedes manejar un paso por el ejército y ganar una baja honorable, no sólo serás nuevamente un candidato viable para la universidad, sino que también serás elegible para la preferencia de admisión especial y el GI Bill en términos de financiación de la educación. Además, tendrás una pluma en la gorra para un posterior empleo, ya que muchos empleadores y agencias dan preferencia a los veteranos al contratar.

No mientas sobre tu pasado

Puede ser tentador omitir toda referencia de tu expulsión al inscribirte en una nueva escuela. No cometas este error. Tu aplicación con la omisión puede muy bien ser aceptada en un primer momento ya que las universidades no siempre cuentan con un sistema de control automático de entrada para ver si fueron expulsados ​​antes; confían en tu honestidad y en las transcripciones proporcionadas. Sin embargo, las universidades y los institutos acceden a los registros de matriculación de estudiantes existentes a través de bases de datos compartidas. Si una escuela posteriormente descubre que mentiste en tu solicitud u omitiste hechos requeridos, podrías ser expulsado nuevamente, y en el acto. Y este tipo de violación no tendrá una apelación.

Conclusión

Ser expulsado no es la última palabra sobre tu educación superior. Sin embargo, es probable que tengas que encontrar un nuevo camino para llegar a tus metas que no anticipaste tener que tomar. Si eres paciente y persistente, podrás probar tu capacidad para funcionar en la escuela y ser aceptado de nuevo. Apela cada oportunidad que tengas, y restablécete por medio de habilidades y otras oportunidades si es necesario.

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