¿Por qué crujen tus articulaciones?

¿Por qué crujen tus articulaciones?
i ¿Por qué crujen tus articulaciones?

A medida que las temperaturas suben y bajan, ¿notas que tus rodillas, hombros o espalda empiezan a ponerse un poco rígidos? O cuando te mueves de cierta manera, ¿escuchas crujidos? ¿Y qué pasa cuando estás en el medio de tu entrenamiento favorito y oyes un fuerte chasquido de tus rodillas?

A veces, estos sonidos no significan nada, pero cuando los crujidos y crepitaciones están acompañados de dolor o hinchazón, puede significar algo completamente diferente. Entonces, ¿qué intentan decirte exactamente tus articulaciones?

¿Por qué las articulaciones suenan, crujen y hacen chasquidos?

Las articulaciones que generalmente producen sonidos son las rodillas, los tobillos, los nudillos, el cuello, las caderas y la espalda. Y hay algunas razones del por qué. Para que tus articulaciones se muevan sin problemas, tu cuerpo crea un fluido que actúa como lubricante y permite el movimiento en múltiples direcciones y la rotación.

Se llama líquido sinovial y su función es reducir la fricción entre el cartílago y las articulaciones durante cualquier tipo de movimiento. El líquido sinovial contiene una mezcla de gases, y cuando una articulación produce un chasquido o salta, los gases en el líquido se liberan y se forman burbujas, y eso es lo que causa esos sonidos que escuchas.

Pero eso no es todo: algunas veces, cuando una articulación se mueve, el tendón que la rodea puede salirse de lugar y cuando vuelve a su lugar, escucharás un chasquido o crujido. Y si sufres de artritis, los sonidos que provienen de las articulaciones artríticas a menudo son causados por la pérdida de cartílago, lo que causa una aspereza en la superficie de la articulación.

¿Por qué crujen tus articulaciones?
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¿Puedes evitar los crujidos en las articulaciones?

Dependiendo de si existe o no una afección subyacente, es mejor trabajar para mejorar la movilidad de las articulaciones que son responsables de los chasquidos y crujidos, así como también para garantizar que todos los músculos se usen por igual.

Digamos que has estado escuchando un sonido proveniente de tus rodillas. Los músculos que rodean las rodillas pueden estar tensos, lo que hace que los tendones se estiren en exceso y vuelvan a su lugar. Debes incorporar ejercicios y estiramientos en tu rutina que ayudarán a fortalecer todos los músculos en esa área, así como otros músculos que afectan la movilidad y la fuerza de la rodilla, incluidos los flexores de la cadera y las bandas iliotibiales.

¿Es dañino?

Sí y no. Algunas veces, el crujido de las articulaciones es un signo de artritis y/o de degeneración precoz de la superficie articular (también conocido como crepitación).

¿Cómo puedes saberlo? Una señal clara de que algo más grave está sucediendo en tus articulaciones es el dolor, la hinchazón, la movilidad limitada o el calor cerca del área que está crujiendo o saltando.

Escucha a tu cuerpo

Ya sea que vayas a correr, levantar pesas o simplemente caminar por la oficina, es importante escuchar lo que tu cuerpo te está diciendo. Si en algún momento los ruidos en las articulaciones van acompañados de dolor, programa una cita con un médico para que te revisen.

No deseas que las condiciones subyacentes, como la tendinitis o la bursitis, empeoren. Un examen físico puede servir para descartar un diagnóstico de esta naturaleza y ayudarte a ti y a tu médico a decidir las opciones de tratamiento adecuadas.

Este artículo fue realizado con la ayuda de www.livestrong.com

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