Técnicas para el mantenimiento del hogar

Haz que lavar ropa sea más sencillo invirtiendo en cestos adicionales para ropa sucia.

Chris Clinton/Lifesize/Getty Images

Adoptar una o dos técnicas eficientes para el mantenimiento del hogar puede reducir el tiempo y el trabajo empleado en ello. El acto de limpiar la casa debería comenzar siempre con un plan, más que con una decisión al azar. Reduciendo lo que planeas limpiar, cómo y cuándo planeas limpiarlo , puedes no sólo hacer que el proceso sea más rápido, sino incluso comenzar a disfrutar de la actividad del mantenimiento del hogar en sí.

Establecer rutinas

Establecer una rutina es una técnica de mantenimiento del hogar efectiva para aquellos que tienden a dejar que las cosas se extiendan demasiado. Reparte tu rutina de limpieza en tareas que deben hacerse a diario, de forma semanal y de forma mensual. Planear de forma creciente y gradual implica poner las tareas diarias, como recoger los platos sucios u ordenar después de que los niños han estado en el lugar, deben hacerse antes que otras que pueden esperar, como limpiar la cocina o pasar la aspiradora en todos los cuartos de la casa.

Atajos temporales

Aquellos que se encuentran con largas horas de tareas hogareñas deberían adoptar una técnica que se enfoca en recortar ese tiempo. Un buen método para ello es encontrar atajos que reduzcan el tiempo perdido innecesariamente. Esto significa adoptar prácticas como guardar los productos de limpieza del baño dentro del baño, en lugar de bajo el fregadero de la cocina. Usa un armario que esté en un ambiente central para guardar los equipos de limpieza, como la aspiradora, trapos para polvo, mopas, escobas y limpiadores. La idea detrás de esta técnica es pasar más tiempo limpiando y menos yendo a buscar los productos que necesitas.

Limpia mientras estés al teléfono

Adopta la técnica del "multitasking" (múltiples tareas), combinando tus llamadas telefónicas con el tiempo de limpieza. Hay gran cantidad de tareas de mantenimiento del hogar que pueden hacerse mientras hablas por teléfono. Sólo necesitas una mano para vaciar la lavadora de platos, planchar cosas fáciles, recoger juguetes, sacudir el polvo e incluso barrer. Usar un dispositivo telefónico que deje las dos manos libres abre aun más oportunidades para el multitasking.

Lavar ropa

Invierte en una cantidad de cestos de ropa sucia en lugar de en uno central que esté colocado en el baño, y quizás hasta puedas ir más allá, dividiendo la ropa sucia en blanco y colores entre diferentes ocupantes de la misma habitación. Si eliges la técnica sencilla de un cesto por cada habitación, entonces será más fácil para ti colocar cestos en la sala de lavandería donde separes blancos, colores y prendas que necesitan un lavado especial.

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