Step 1

Compra aparatos ultrasónicos repelentes de roedores para tu casa o para donde quiera que las ratas se hayan instalado. A diferencia de los humanos, que pueden oir una gama entre los 16 y los 20 kHz, las ratas pueden oir sonidos ultrasónicos de hasta 90 kHz. Los repelentes ultrasónicos están diseñados para emitir un sonido agudo que las ratas y los ratones pueden oír. Se dice que esos sonidos agitan a los animales tanto que los fuerzan a mudarse.

Step 2

Coloca el aparato repelente ultrasónico en un área en la que quieras que las ratas dejen libre. Asegúrate de colocar por lo menos un aparato por habitación o espacio en el que los animales estén anidando, así como en otras partes de la zona. Por ejemplo, si las ratas están viviendo dentro de tu casa, coloca estos aparatos en cada habitación, así como en el sótano, el garaje y el altillo. Debido a que las ondas de sonido no pueden penetrar las paredes u obstáculos gruesos, puede ser que debas colocar más de uno en alguna habitación. Asegurándote de que hay suficientes repelentes en la casa eliminarás la posibilidad de que haya lugares tranquilos en los que puedan reanidarse. Si tienes los aparatos suficientes, los roedores no podrán tolerar el sonido y dejarán los nidos.

Step 3

Instala un aparato de sonido para pájaros en la zona en que las ratas tienen sus nidos. El aparato simula los sonidos de aves depredadoras, como de lechuzas y halcones, que son los que cazan a las ratas. Muchos de estos modelos vienen con dos ajustes: un movimiento sensorial que se disparará cuando pase una rata y un cronómetro automático que salta cada 30 minutos. Arma el aparato en la zona en que las ratas están anidando. Los roedores oirán a las aves depredadoras, se sentirán incómodos y se mudarán.