Familiaridad y comodidad

Una caja de arena puede tener un olor desagradable para ti y para mí, pero para el gatito huele como él. Un gato tímido o nervioso puede sentirse atraído por la caja de arena, ya que le da comodidad. Si le proporcionas una cama suave y cubierta (incluso si es sólo una caja de cartón forrada con una toalla), puede mudarse a esta última.

Los hábitos son difíciles de erradicar

Si el gato ha sido mantenido en una jaula pequeña durante algún tiempo (como por ejemplo, en un refugio), puede que no haya tenido ningún lugar cómodo donde tenderse, salvo en la caja de arena, y estos gatos suelen elegir a esta última para dormir. Si lo adoptaste recientemente, puede que le tome algún tiempo erradicar ese hábito. (Nota: no utilices arena absorbente para los gatitos menores de 8 semanas.)

Alivio a la ansiedad y seguridad

Dado que la caja de arena es un lugar "familiar", un gato que tiene miedo o está ansioso, tal vez porque lo está molestando otro animal o un niño en la casa, puede retirarse a la caja de arena. Un problema de este tipo puede requerir un poco de entrenamiento conductual para ambas partes, o un medio de separación.

Privacidad

A la mayoría de los gatos les gusta tener escondites y espacios al resguardo donde puedan encontrar privacidad, aún cuando no se sientan amenazados. Las cajas de arena a menudo cubren sus expectativas. Una vez más, una cama con contención o un escondite en un lugar fuera de las zonas de tránsito podría alejarlo de zona del baño.

Enfermedad

Un gato que esté teniendo problemas con su vejiga, o diarrea, puede desear permanecer cerca de la caja de arena. Sin embargo, cualquier tipo de enfermedad puede hacer que un gato se retire a un lugar donde sienta seguridad, privacidad y comodidad. Si no puedes diagnosticar el motivo por el que duerme en la caja de arena, sería aconsejable realizarle un examen veterinario.