Step 1

Coloca un humidificador en la habitación. Añade 3 cucharaditas de jugo de limón fresco en el agua. El humidificador elimina el olor a humo y le da un aroma de limón al aire. Cambia el agua cada semana y sigue siempre las instrucciones que vienen con el humidificador para que lo uses correctamente.

Step 2

Rellena todos los ceniceros con arena para gatos no aglutinante. La arena para gatos apaga los cigarrillos y absorbe los olores a humo.

Step 3

Vierte vinagre blanco en un recipiente limpio o en tazones poco profundos. Colócalos en toda la habitación para absorber el olor a cigarrillo. Vuelve a colocar el vinagre cada dos o tres días hasta que desaparezca el olor.

Step 4

Lava las paredes de la habitación con un limpiador de uso múltiple. Frota las paredes con una esponja no abrasiva para eliminar cualquier acumulación de alquitrán o nicotina.

Step 5

Abre las ventanas de la habitación para dejar que el aire circule. Coloca ventiladores de ventana en ellas para ayudar a eliminar el humo de la habitación.

Step 6

Coloca hojas de suavizante en los cajones, armarios o en bolsas de plástico con objetos pequeños. Las hojas absorben los olores y dejan un olor fresco.

Step 7

Aplica bicarbonato de sodio sobre la alfombra. Aspira la alfombra después de dos a tres horas para eliminar el olor a humo de las fibras.

Step 8

Moja un paño en vinagre blanco destilado. Exprime el exceso de vinagre de la toalla y agítala alrededor de la habitación durante dos o tres minutos para eliminar los olores de humo rápidamente.