Step 1

Las serpientes bebé pueden comer ratones bebé "rosados", que son ratones recién nacidos que no han desarrollado ningún tipo de pelaje. Una regla general para escoger al ratón adecuado es que éste no debe ser más largo que lo ancha que es la serpiente en su parte más amplia.

Step 2

Puedes alimentar tu serpiente ya sea con presas vivas o previamente matadas y congeladas. Con una serpiente joven, no importará si escoges alimentarla con presas vivas o muertas. No obstante, mientras la serpiente vaya creciendo, requerirá ratones más grandes, y esos ofrecerán pelea mientras la serpiente intenta devorarlos. Las serpientes de maíz son perfectamente capaces de pelear y son predadores adaptables, pero si te preocupa, debes alimentarla con presas congeladas desde un inicio; la mayoría de las serpientes no disfrutarán de las presas congeladas una vez hayan probado a las vivas.

Puedes conseguir los ratones en una tienda de animales y colocarlos en el congelador para matarlos. Es recomendable que no los dejes en él por más de 24 horas.

Step 3

Simplemente coloca la presa viva o congelada en el tanque de la serpiente y permite que ésta lo coma. No toques o molestes a la serpiente por 24 horas tras haberla alimentado.

Step 4

Si estás dándole a tu joven serpiente un ratón congelado, puede que ayude el calentar la presa antes de dársela a la serpiente. Simplemente coloca al ratón en un tazón con agua caliente por 3 o 4 minutos.

Step 5

Si tienes dificultades para que la serpiente coma la presa congelada, punza la cabeza del ratón con un cuchillo para esparcir su aroma por la jaula.