Step 1

Alisa la masa antes de añadir los huevos. El queso crema y los otros ingredientes pueden tener grumos. Usando tu batidora eléctrica, suaviza la mezcla antes de añadir los huevos. Esto asegurará una masa suave y no tendrás que preocuparse de batir de más los huevos.

Step 2

Hornea el pay de queso a una temperatura más baja. Dependiendo de la receta, es aconsejable hornearlo hasta 350°F (177°C). En su lugar, opta por hornearlo a una temperatura más baja. Esto podría añadir unos minutos del tiempo de cocción, pero también se evitará que las proteínas del huevo coagulen de más. Cuando esto ocurre, el pay puede agrietarse cuando se enfría.

Step 3

Hornea tu pay de queso a baño maría. En este tipo de baño colocas tu molde para pay en uno más grande que se llena con un poco de agua. Conforme el agua se calienta y comienza a evaporarse se elevará el nivel de humedad en el horno, lo que ayuda a mantener la humedad de la tarta de queso.

Step 4

Retira la tarta del horno en el momento adecuado. Los tiempos de cocción pueden variar dependiendo del tamaño del pay y el tipo que estás horneando. Sin embargo, debe ser retirado del horno cuando su centro está todavía blando o tambaleante. Al quitar el pay del horno, todavía se seguirá cociendo y el centro se pondrá firme.

Step 5

Enfría el pay de queso de forma gradual. Otro truco es apagar el horno y dejar que poco a poco la tarta se enfríe en un período de 45 minutos a 1 hora. Esto significa apagar el horno unos minutos antes de lo que indica tu receta para que no se cocine demasiado. Enfría en el horno, primero con la puerta cerrada y después con la puerta abierta, para que se contraiga el pay. Esto es normal y es mejor que ocurra suavemente, no rápido, debido a la diferencia de temperatura.

Step 6

Busca recetas de pay de queso con harina o almidón de maíz. Estos aditivos se mezclan con las proteínas del huevo y evitan el exceso de coagulación para obtener un pay de queso sin grietas.