Historia

El término "cincel" se cree que ha evolucionado a partir de la palabra latina "seco" (o corto) o la palabra francesa "Ciseau". Como indican los descubrimientos arqueológicos antiguos, los burdos precursores hechos de piedra de los cinceles de hoy en día pueden haber sido los primeros de su tipo utilizados por el hombre primitivo. Aunque mejorados, se cree que se utilizaron versiones para tallar mármol en el siglo VI a. C. en Grecia; sin embargo, las inscripciones en una antigua tumba de Egipto del siglo VII antes de Cristo sugieren lo contrario.

Función

Los cinceles pueden ser identificados por sus característicos bordes cortantes planos y anchos con ángulo (cuchillas). Están equipados con asas de madera o metal, aunque algunos conjuntos de cinceles —tales como los utilizados en piedra, metal o de hormigón— no tienen asas y se fabrican de metal, generalmente de hierro o acero.

Función

Los cinceles se utilizan sobre todo para el corte, cepillado, acanalado, tallado y acabado de los materiales; como madera, piedra, metal o mármol. Sin embargo, las aplicaciones finales y los materiales por lo general determinan qué tipo de cincel se va a utilizar. Para funcionar eficientemente, los cinceles se manejan en el material de base de forma manual utilizando diferentes niveles de presión, dependiendo de la naturaleza de la tarea prevista. Un martillo o un mazo se utiliza generalmente como la fuerza impulsora para ejercer presión en el cincel de mano que se utiliza.

Tamaño

Hay muchos tipos y tamaños de cinceles, ya que hay aplicaciones específicas. Sin embargo —debido a que los cinceles son básicamente herramientas manuales pequeñas— las longitudes de los diferentes tipos de cinceles, dentro de un conjunto particular, son más o menos las mismas. Aún así, la anchura de sus cuchillas de cortes individuales vienen en varios tamaños, dependiendo de la naturaleza y complejidad de las tareas o proyectos a realizar.

Falsas creencias

Los cinceles, ya sean para metal o madera, se perciben como muy simples y fáciles de usar comparados con las herramientas eléctricas. Sin embargo, la verdad es que se requiere de mucho tiempo (incluso años) para que el usuario adquiera la suficiente experiencia y habilidades para la utilización correcta y eficaz. Un escultor es un claro ejemplo. Ésto es debido a que la precisión de un corte, gubia, o talle dependerá en gran medida de la presión correcta ejercida sobre el cincel y el material, así como la precisión y el posicionamiento angular de la hoja respecto a la superficie de los materiales o los objetos.

Advertencia

Al igual que con las herramientas eléctricas, las medidas de seguridad también son necesarias cuando se trabaja con cinceles. La cabeza, los ojos, dedos y la parte superior del cuerpo deben protegerse con equipo tal como casco, gafas, guantes, y chaleco de seguridad; sobre todo cuando se trabaja con materiales como piedra, hormigón, mármol, metal o madera. Además, un ángulo de la cuchilla o presión incorrectos ejercidos sobre el cincel y sobre la superficie del material, puede estropear o dañar el material de base o el objeto con el que se trabaja.