Receta casera para fertilizante de orquídeas

Las orquídeas son una opción atractiva para los jardineros.

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Las orquídeas, la familia más grande de plantas con flores, crecen en casi cualquier clima donde puedan desarrollarse especies florales, y existen en una variedad deslumbrante de tamaños, colores y fragancias. Sus hermosas flores e interesantes características hacen que sean una opción atractiva para los jardineros, pero ayudarlas a prosperar requiere tiempo, esfuerzo y el fertilizante adecuado. Los fertilizantes comerciales para orquídeas son eficaces, pero si quieres adoptar un enfoque más personal, puedes intentar algunas alternativas caseras.

Requisitos de alimentación de las orquídeas

Las orquídeas se desarrollan mejor cuando son alimentadas con el equilibrio adecuado de nitrógeno, fósforo y potasio, administrado en una fórmula soluble en agua. De acuerdo con Orchid Lady, la creencia de que las orquídeas necesitan fertilizantes de alto contenido de nitrógeno ha sido refutada por estudios recientes y un fertilizante NPK 7-9-5 (los números indican la proporción de nitrógeno, fósforo y potasio) resulta óptimo. Dado que la mayoría de las orquídeas en la naturaleza crecen por encima del suelo y son alimentadas y regadas por la escorrentía de la lluvia, obtienen sus nutrientes en una forma muy diluida. Ésta es la razón de la regla de oro que implica una fertilización ligera una vez por semana (es decir que para obtener mejores resultados deberías proporcionar a tus orquídeas una alimentación bien diluida cada siete días).

Recetas

Para asegurarte de que tus orquídeas obtengan suficiente calcio y potasio, prueba usar cáscaras de huevo licuadas. Hierve 20 cáscaras de huevo en un galón (3,78 litros) de agua y déjalas reposar durante ocho horas. Cuela las cáscaras de huevo, almacénalas en un recipiente con tapa y úsalas semanalmente. Otra manera en que puedes suministrar calcio y potasio a tus orquídeas es usar papas en cubos que hayas hervido durante varios minutos junto con trozos de plátano fresco. También puedes fertilizarlas con el agua en que hayas cocinado arroz, proporcionándole vitaminas adicionales. Asegúrate de que este líquido se haya enfriado a temperatura ambiente antes de usarlo. Otros ingredientes populares en los fertilizantes caseros incluyen la melaza, que contiene potasio, las sales de Epsom, que poseen magnesio, y los huesos de pollo secos triturados, para el suministro de calcio y potasio.

Precauciones

Si no estás seguro de la bienvenida que tus orquídeas le darán a tu brebaje casero, hay maneras de minimizar los riesgos. Utiliza una orquídea más económica como conejillo de indias. O, para estar más seguro, diluye un poco de fertilizante comprado en tiendas con agua y agrégalo a la mezcla. Mantente atento de evitar una fertilización excesiva, ya sea casera o comercial. Los signos incluyen costras blanquecinas en la tierra para macetas (que es un signo de acumulación de sal), raíces ennegrecidas y hojas que mueren en las puntas.

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