Materiales

Las chancletas pueden fabricarse de distintos materiales. Las versiones más económicas son usualmente de poliuretano, espuma plástica o goma barata. Las más caras se pueden hacer de maderas especiales como el corcho para darle comodidad y soporte a los pies, vinilo de alta calidad u otras combinaciones de materias primas. Algunas empresas usan neumáticos de coches reciclados para crear una suela económica, duradera y amigable para con el medio ambiente, mientras que otras usan sólo productos orgánicos.

Diseño

Las chancletas varían en diseño, color y materiales, de modo que pueden servir a distintos propósitos, distintos estados de ánimo e incluso distintas ocasiones. Por ejemplo, unas chancletas de espuma en colores brillantes son ideales para una fiesta en la piscina, mientras que unas chancletas de suela de madera con una tira en diseños florales son más apropiadas y útiles para la playa. Las chancletas más caras de cuero se pueden ver en las pasarelas de moda en París, y las chancletas de satén y seda a menudo se usan como calzado casual. Los diseños tienden a variar por temporada y según la preferencia del usuario.

Piezas

La mayoría de las chancletas están compuestas de solo dos piezas, la suela y la tira superior en forma de V con tres extremos unidos a la misma. La suela se puede cortar de prácticamente cualquier material usando un molde o patrón del pie. Las tiras son algo más complejas de fabricar y requieren de trenzar un material o de un diseño especial para amoldarse a la forma necesaria.

Fabricación

La fabricación de una chancleta se hace mediante uno de tres procesos. El primero y más sencillo sólo se aplica a las chancletas más baratas. La suela se corta en un material y la tira para los dedos se corta en vinilo u otro material flexible. Se punzonan orificios en la suela y los extremos de la tira se atan por debajo de la misma. El segundo método también se aplica al calzado económico y tiende a ser el menos duradero. Las tiras se unen a la suela mediante pegamento o puntos de costura. El tercer método implica taladrar un orificio en 3/4 del grosor de la suela y unir las tiras mediante costura o pegamento.