Síntomas de una herida infectada en un perro

La hinchazón en el lugar de la herida es la indicación básica de infección. La propagación de la irritación o la decoloración alrededor de la herida también es un signo común. Por otro lado, si la herida estaba sanando, la irritación tendría que desaparecer en lugar de esparcirse. Si aparece una mancha gruesa amarilla o verde, se trata de un síntoma de infección, además de un olor apestoso. El dolor y la sensibilidad en el perro también son síntomas comunes que sugieren una infección.

Prevención de infecciones en heridas menores

Las heridas menores como cortadas pequeñas y rasguños necesitan desinfectarse con jabón y agua caliente. Después de que la herida esté seca, aplica un ungüento antiséptico y revisa la herida para evitar que haya infecciones. Algunos signos que sugieren infección incluyen fiebre, hinchazón y aumento en la irritación en el sitio de la herida. Es importante llevar al perro al veterinario en caso de que haya alguna sospecha de infección para que el animal reciba antibióticos para luchar contra la infección.

Heridas por mordeduras

Las heridas por mordeduras son especialmente propensas a una infección. Cuando un perro recibe una mordida de otro animal, ésta puede enviar bacterias desde el hocico hasta las capas del tejido que está debajo de la piel. Esta es la primera razón por la que cualquier herida por mordedura de perro debe limpiarse con rapidez, y un veterinario debe revisarla —la lesión puede durar sólo algunas horas después de la mordida, aunque a veces tarda hasta una semana. Además de los signos básicos de infección como la hinchazón, el aumento en la irritación y olor apestoso, un perro con una infección de mordedura puede perder el apetito, estar letárgico o deprimido y perder actividad física. El aumento en la temperatura corporal es otro síntoma.

Heridas abiertas

Las heridas en los perros como una herida abierta puede ocurrir cuando se pierde de vista a un perro por algunos momentos. Una herida abierta es una rotura en la piel o en la mucosa del perro. Las heridas abiertas en los perros pueden causarse cuando un perro se enreda en los arbustos y en las ramas, en una valla rota o por una mordedura de otro animal. Cuando se genera una herida abierta, las infecciones pueden viajar rápidamente por debajo de la piel para formar un absceso. Las infecciones por herida abierta en los perros pueden afectar los músculos, los huesos, la médula espinal o la sangre, que puede llevar a una condición fatal conocida como septicemia.

Prevención de infecciones por abrasiones

Las abrasiones son heridas cutáneas causadas cuando la piel de un perro se raspa o se rasga contra una pared dura y áspera. Debido a que los perros están protegidos con su pelaje; ellos no sufren tanto de abrasiones como los humanos. Por lo general, las abrasiones caninas ocurren debido a que un perro fue golpeado por un auto o arrastrado o arrojado al suelo. Un perro herido por un accidente de auto debe ser tratado inmediatamente con el veterinario en caso de que haya heridas internas. Generalmente los perros que reciben primero tratamiento por abrasiones tienen pelo alrededor del área lastimada. Después la herida se limpia usando agua caliente con sal o un antiséptico. Cualquier pérdida de materia extraña debe removerse. Si la abrasión es pequeña, por lo general no se venda para que pueda limpiarse y mantenerse en observación. Sin embargo, las abrasiones más grandes generalmente requieren de gasas y vendajes.

Precaución

Antes de tratar la herida de un perro, primero ponle un bozal. Los bozales pueden hacerse con un cinturón, una cuerda o incluso unas pantimedias. Cubre el hocico hasta la parte superior de la nariz del perro y después hasta su mandíbula. Después de entrecruzar el material, ponlo detrás de la cabeza y apriétalo.

También es importante que no toques ninguna de las heridas por mordedura antes de usar guantes de látex o de goma para protegerte, ya que los humanos pueden contraer rabia con facilidad con sólo tocar una herida.