Construcción

Las planchas delgadas de suelos flotantes están hechas de varias capas de chapas de madera, muy parecida a la madera contrachapada. Una fina capa de laqueado, hace que la madera sea atractiva y se convierte en una nueva superficie del piso. Los tablones o bien tienen canales de bloqueo que se acoplan entre sí o lengüetas y ranuras que se unen para conseguir una instalación apretada permanente.

Instalación

Los pisos flotantes se llaman así porque se instalan sin estar conectados al subsuelo. Se adjuntan unos a otros, las tablas flotan en la parte superior del papel de resina o recubrimiento de espuma fina establecido en la parte superior del subsuelo. Las lengüetas y las ranuras del piso están pegadas la una a la otra y firmemente se golpean con un mazo de caucho para asegurar un agarre firme y rápido. Los zócalos y molduras se instalan unidos a la pared, no en el piso, permitiendo que el suelo se expanda y se contraiga temporalmente sin rajarse.

Pegamento

Las lengüetas y ranuras de los pisos flotantes requieren una pequeña gota de pegamento amarillo de carpintero en la ranura El pegamento se extiende cuando la lengüeta toca en su lugar, formando un buen agarre. Si se utiliza demasiado pegamento, se escurre a través de la parte inferior de la junta y pega los tablones al papel o a la espuma debajo. El exceso de pegamento que aparece en la superficie debe eliminarse inmediatamente con un paño húmedo.

Consejos

Los pisos flotantes están disponibles en muchos tipos de madera. Algunas maderas duraderas tropicales más caras, como el cerezo brasileño y madera del tigre, son a menudo prohibitivamente caras si se compran con el piso sólido. Los pisos de ingeniería de calidad están hechos de chapas de madera auténtica. Los productos hechos de fibras de madera y laminados de plástico no duran tanto como los hechos de madera verdadera y acabados transparentes duraderos.