¿Cómo comienza la tradición?

La tradición de enterrar una estatua de San José comenzó en Europa alrededor de 1515 después de Cristo. Las monjas en un convento necesitaban expandir sus tierras. Comenzaron por enterrar medallas impresas con la imagen de San José en la tierra. Sus oraciones fueron escuchadas, y dentro de un corto período de tiempo recibieron su solicitud. No está claro cómo el uso de medallas de San José se convirtió en la utilización de estatuas de San José.

¿Por qué continúa funcionando?

Uno no tiene que ser católico para seguir la tradición de la estatua de San José. Sin embargo, lo que se requiere es una verdadera oración de fe. Si bien algunos podrían ver la sepultura de una estatua como una mera superstición, el ritual refuerza la idea de que la venta de la casa ha sido entregado en las manos de Dios. El milagro se crea a través de la fe en Dios y sus santos, y no simplemente a través de la compra de una figurilla de plástico.

¿Qué hacer con la estatua de San josé?

Empieza por elegir un lugar de honor en el frente de la casa para enterrar a la estatua de San José. Tener una conexión mental positiva con la ubicación es muy útil. Por ejemplo, enterrar la estatua en un jardín de flores sería una opción mejor que enterrarlo en el patio al lado del contenedor de basura. Para aquellos que viven en un condominio, se puede optar por colocar San José en el fondo de una planta de maceta. Otro buen lugar para enterrar la estatua se encuentra directamente al lado del "Se Vende" en frente de la casa.

La estatua debe ser enterrada boca abajo, con la cara de San José frente a la casa. Lo más importante mientras la estatua está siendo sepultada es rezar a San José. Pídele que bendiga tu vida con la venta de la misma tan pronto como sea posible. No olvides de pedirle tu precio deseado para vender la casa o un precio por encima de él. Sigue rezando a San José hasta que la casa se ​​venda. Después de que la casa se venda, retira la estatua y llévala contigo.

Después de mudarte a la nueva casa, coloca la estatua en el interior de la casa en un lugar de honor. Asegúrate de dar las gracias a Dios por enviar a San José para bendecir tu vida.