Juegos para la escuela dominical pensados para niños de 4 años

¡Muévete con Jesucristo!

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Haz que la iglesia sea divertida con algunos juegos basados en la biblia para las clases dominicales, pensados para niños de 4 años. Los chicos responden bien a los juegos y a las clases interactivas. Leer la biblia y colorear a menudo es algo viejo y trillado. La mayoría de los niños de 4 años no pueden leer por su cuenta, por lo que hacer que los encuentros sean interesantes es la clave. Levanta a tus alumnos de sus sillas y enséñales algunos cuantos juegos divertidos.

Jugar al escondite con la historia del Arca de Noé

Esta variante se asemeja bastante al juego clásico y puedes jugarlo en la escuela dominical. Después de dar la clase sobre el Arca de Noé, diles a tus alumnos que escondiste parejas de peluches por toda la habitación. Como trabajarán duro hasta encontrarlos, los niños sentirán la sensación de haber cumplido el objetivo propuesto y registrarán el aula en busca de los animales. Procura que depositen los juguetes en un arca de cartón y guárdalos allí mientras buscan el resto. Una vez que terminen, todos los peluches deberán ser alineados de a dos fuera del barco.

Lanza el saquito y agradece

Diviértete con el juego del saquito, pero con una vuelta de tuerca, dando las gracias a Dios, para tener una actividad más relajante. El juego es tranquilo y sencillo y es ideal para el final de la clase. Haz que los alumnos se sienten y formen un círculo cruzando las piernas. Empieza explicando qué es lo que te gustaría agradecerle a Dios y pásale el puf o el almohadón que estén usando para jugar a otro niño, que tendrá que ser agradecido con el Señor por otra cosa y pasarlo a otro compañero. Aliéntalos a que se den cuenta de que todos tienen que participar para que no le pasen el almohadón siempre al mismo amigo. Comparte las respuestas que tuvieron con sus padres cuando los recojan para volver a casa.

Ponle la cola al burro, pero con la historia de Goliat

David y Goliat se ha convertido en una historia interesante y dinámica para los niños a través de este juego seguro y amistoso que se relaciona con el clásico "ponle la cola al burro". Después de enseñar la historia, haz que tus estudiantes hagan una fila. Coloca un cartel o un dibujo sobre la pizarra que represente a Goliat. Dale a cada uno de tus alumnos una cartulina que funcione como una "piedra" y que tenga cinta del lado de atrás. Venda los ojos del primero y dile que trate de poner la roca sobre la frente de Goliat, que se lo conoce por ser un gigante, por lo que deberías asegurarte de que los niños tengan que hacer un esfuerzo para alcanzar la imagen. Deja que cada alumno tenga su turno y entrégale un pequeño premio al que estuvo más cerca.

Palomas voladoras

Las palomas voladoras es un juego que puede montarse una semana después del del Arca de Noé y está basado en el pasaje en que Noé libera la paloma blanca. Tendrás que traer una pequeña rama con unas hojas. Explícales a los estudiantes que la rama es como la que la paloma le trajo de vuelta a Noé. Diles también que cierren los ojos mientras la escondes en algún lugar. Ocúltala en algún punto en el que no puedan encontrarla. Ordénales que abran los ojos, y que muevan sus alas (sus brazos) y vuelen alrededor en busca de la rama. Noé envió a la paloma a que saliera a buscar tierra firme y en este juego ellos son las aves. Déjalos que revisen por un buen rato y luego diles que vuelvan al arca y descansen. Convéncelos de que cierren de nuevo los ojos y esconde la rama esta vez en un lugar más fácil. Pídeles que abran los ojos y repíteles que Noé liberó la paloma para buscar tierra firme y haz que muevan sus alas para encontrar la rama. Los niños la encontrarán de igual manera en que ocurrió en la historia.

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