Juegos para hacer en las reuniones de iglesia para adultos

Los juegos pueden ayudar a que todos se reúnan y pasen un buen momento.

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Jesús dijo que la fraternidad era uno de los propósitos principales de la iglesia, y la mayoría de las congregaciones está de acuerdo en que los cristianos lo hacen bien, hasta que aparecen nuevas caras. Salir de tu zona de seguridad y hacer que las personas se sientan cómodas no es algo fácil para todos. Cuando están trabajando con niños, los pastores jóvenes rápidamente usan juegos para romper el hielo y crear relaciones. Los adultos pueden usar los juegos con el mismo objetivo, para reforzar las relaciones y transformar la función de la fraternidad de la iglesia a una en que todos puedan mezclarse y pasar un buen momento.

Preguntas dulces

Coloca un bol con dulces pequeños.

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Cuando sea que haya una mesa puesta, se puede jugar este juego. Todo lo que necesitas para este juego es un bol con pequeños dulces como los M&M para cada mesa, una cuchara para servirlos y platos o servilletas. Este es un excelente juego para que los grupos nuevos se conozcan, tales como el grupo de Biblia, y puedes hacerlo a media mañana o en cualquier momento del día. Pídeles a los miembros que tomen un dulce, pero que no se los coman todavía. Alienta a que todos tomen al menos un par. Hazlos esperar un poco (este es el momento perfecto para hacer los anuncios o hacer una oración). Dile al grupo que caminarás por toda la habitación, y por cada dulce que tengan, cada persona debe decir algo de sí misma. Puedas ayudarlos si fuera necesario –preguntándoles sobre su libro favorito, cuántos niños hay en la familia, lo que sea. Si el grupo es muy grande para que cada uno comparta algo, divide al grupo en mesas para hacer la actividad.

Verdadera identidad

Haz que formen un círculo para que todos puedan verse.

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Existe otro juego para conocerse. Indícales que formen un círculo para que todos puedan ver a todos los demás. Este juego no necesita ninguna preparación especial, lo que lo hace perfecto para hacerlo en cualquier momento. Comienza el juego diciendo tu hombre y haciendo un comentario sobre ti -“Soy Barbara y me gusta leer”. La persona que sigue debe repetir lo que tu dijiste y agregar algo sobre él. “Ella es Barbara y le gusta leer, y yo soy John y comí pizza en el desayuno”. A medida que las personas vayan hablando, la oración se hace más grande hasta que llegues al final del círculo.

Notas adhesivas ¿quién soy?

¿Quién soy?

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Prepara pequeñas tarjetas o notas adhesivas con anterioridad con nombres de animales, personajes de libros, personajes famosos, personajes bíblicos o de cualquier cosa que te puedas imaginar. Pide a todos que tomen una pero que no lean lo que está escrito, y que peguen o sostengan la tarjeta en su frente. Todos deben caminar alrededor y hacerse entre ellos una pregunta, tratando de averiguar quién es -“¿Soy un animal?” o “¿Por lo general me visto de rojo?”, como por ejemplo. La persona que responda debe decir “si”o “no” y luego dirigirse hacia otra persona. El juego continua hasta que todos descubran su identidad.

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