Peinados y maquillaje al estilo de 1940

El pelo se usaba más largo en los años 40 que en las dos décadas anteriores.

George Marks/Retrofile/Getty Images

La primera mitad de la década de 1940 fue consumida por los esfuerzos para apoyar el desenlace de la Segunda Guerra Mundial. Muchas mujeres se fueron a trabajar y no tenían ni el tiempo ni el dinero para gastar en los románticos pero elaborados recogidos de los años 30. El maquillaje también era un lujo en esa época, de modo que el look natural reinaba en el día a día.

Ondas sueltas

Las tendencias en cabello pasaron de los "bobs" lisos de los años 20, a los recogidos con rizos apretados de los 30. Los peinados de los años 40 fueron el "término medio", con rizos que permanecen en boga, pero que se usan más largos y sobre todo más sueltos. Muchas mujeres llevaban el pelo apenas por debajo del hombro con rizos sueltos en torno al rostro y en las puntas, mientras que la parte media se mantenía lisa. Las mujeres querían los rizos suaves que usaban las glamorosas bellezas de Hollywood como Veronica Lake y Rita Hayworth. Para reproducir el delicado efecto, se usaban grandes rizadores con esponja (carrete español) durante la noche, que se soltaban por la mañana y luego la cabellera entera se cepillaba.

Recogidos y sombreros

Las mujeres siempre tenían el cuidado de arreglar sus rizos para complementar el sombrero, que fue el toque "chic" con que se remataba el impecable estilo de sus trajes y vestidos. Para complementar los sombreros de ala ancha que asentaban en la corona de la cabeza, se usaban recogidos a partir de ondas sueltas que seguían enmarcando el rostro o se formaban moños simples con todo el pelo que se sujetaban en la nuca. Con los recogidos más elaborados, como los grandes rizos meticulosamente arreglados en el frente de la cabeza (los llamados "victory rolls") se utilizaban sombreros más pequeños arreglados en lo alto de la cabeza.

Maquillaje de ojos

La rutina de maquillaje de los años 40 estaba marcada por los tiempos de guerra que trajeron escasez de materias primas y mano de obra para la fabricación de muchos productos, incluyendo los cosméticos. Esto generó unas especie de look simple y natural, sobre todo cuando se trataba de los ojos. La sombra se mantuvo al mínimo y en determinados momentos se vieron toques sutiles de tonos ahumados y acentos grises y marrones. Se llevaba muy poca máscara y sólo una línea fina de delineador si es que no se lo usaba del todo. Aún estaba de moda depilarse las cejas, pero no se les adelgazó como en los 20. Simplemente se les daba forma para que lucieran limpias y ordenadas. En ocasiones se les rellenó siguiendo su grosor natural con un lápiz.

Rostro y labios

Las mujeres de los años 40 gustaban de una tez algo pálida con un poco de brillo transparente. Para ello se aplicaba una base líquida un poco más oscura que el tono natural de la piel, que luego se sellaba con un polvo más claro y pálido que el de la complexión natural. Los tonos de "blush", rubor o colorete, oscilaban entre el rosa pálido y el rojo, aunque los tonos de rojo solían utilizarse más y en todo momento cuando ser trataba de lápiz labial. De los rojos con matices marrones, a los rojos rosados o naranjas, el lápiz labial brillante hizo de los labios el punto central del rostro.

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