Cómo hacer para que la lechuga marchita vuelva a estar crujiente
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La lechuga es un alimento que no se conserva bien y puede llegar a marchitarse a los pocos días de haberla cosechado o comprado. La razón de su corta vida útil es su alto contenido de agua, que es del 94,9%, según informa el sitio web de la Extensión de la Universidad de Illinois. Además, es importante no almacenarla con plátanos, peras o manzanas, ya que estas frutas liberan gas etileno, el cual provoca que lechuga se marchite. No tienes que tirar la lechuga si la ves marchita, ya que hay una manera de volverla crujiente.
Step 1
Llena un recipiente con suficiente agua helada para sumergir completamente las hojas marchitas. Si agregas cubos de hielo al agua del grifo, entonces, espera unos minutos para que se enfríe.
Step 2
Quita las hojas marchitas de la lechuga y lávalas para eliminar la suciedad y los residuos de plaguicidas. Recórtalas y descarta los bordes dañados que tengan un color marrón. La lechuga dañada libera un ingrediente que destruye el contenido de la vitamina C.
Step 3
Coloca las hojas en el tazón de agua helada durante unos segundos. La lechuga está blanda debido a la deshidratación.
Step 4
Saca las hojas fuera del agua, pero no sacudas el exceso. Manténlas tan húmedas como sea posible.
Step 5
Coloca la lechuga mojada en una bolsa de plástico y ciérrala sin presionar las hojas.
Step 6
Coloca la bolsa en el refrigerador durante aproximadamente 3 horas. La lechuga debe estar completamente re-hidratada y fresca.
Referencias
Advertencias
- Desecha cualquier lechuga que haya comenzado a descomponerse, ya que contiene bacterias dañinas.
Sobre el autor
Diane Perez is a writer who contributes to various websites, specializing in gardening and business topics, and creates sales copy for private clients. Perez holds a Bachelor of Science in education from the University of Miami.
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