Cómo tomar la presión sanguínea de los perros

La tensión arterial se nota cuando la presión sistólica está por encima de la diastólica. La sistólica es la más alta en las arterias, que surge cuando comienza a latir el corazón cuando éste se contrae. La diastólica es la más baja y surge cuando las arterias se llenan de sangre. Como los humanos, los perros pueden desarrollar una gran cantidad de problemas de salud, incluyendo la presión alta. Si estás preocupado por la salud de tu mascota, hay dos formas de tomar la presión: directamente e indirectamente. En el método directo, tu veterinario introduce un catéter en una arteria y mide la presión de tu perro. El método indirecto es más común y es muy similar al tensiómetro de presión sanguínea utilizado en los humanos.

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Afeita una pequeña parte de la pierna de tu perro. Esto es importante para garantizar una lectura precisa, especialmente si tienes un perro con un pelaje lanudo.

Asegúrate de que tu mascota esté relajada (pero no sedada) para obtener una lectura precisa. Puedes utilizar el mismo estilo de esfigmomanómetro (lector de presión sanguínea) que utilizarías tú. Si tu perro está lleno de energía, intenta llevar a tu perro a correr durante 30 minutos. Luego deja que se calme y descanse durante 20 minutos. Esto debe disipar la energía extra de tu perro y colaborará mejor cuando intentes tomarle la presión sanguínea.

Sujeta el tensiómetro digital a la pierna de tu perro y sigue las instrucciones que trae tu lector.

Si estás utilizando un modelo antiguo de esfigmomanómetro con un marcador analógico, sujétale el tensiómetro. Debe adaptarse cómodamente, pero no debe estrangular. Con un estetoscopio debajo del tensiómetro, comienza a inflarlo apretando la cabeza sobre el lector. Deja de aplicar presión cuando esté totalmente inflado (oirás el corazón latir lentamente, luego cesa). Mientras suelta lentamente la presión en el tensiómetro inflado, anota la lectura del marcador.

Observa si tu perro tiene la presión sanguínea alta o no. La presión alta puede ser un síntoma de una enfermedad del corazón o del riñón. Para los perros, una presión saludable está alrededor de 147/83. Si la presión de tu mascota es de 170/110 o superior se considera una señal de hipertensión (presión sanguínea alta), entonces debes llevar inmediatamente al animal al veterinario.

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