Cómo limpiar la turmalina

El negro es sólo uno de los muchos colores de la turmalina.

Hemera Technologies/PhotoObjects.net/Getty Images

La turmalina es una piedra fascinante para joyeros, científicos y metafísicos. Viene en un arcoiris de colores, incluyendo rojos, azules, verdes, café, negro, claros e incluso bicolores. Al calentarse y después enfriarse, la turmalina toma una carga eléctrica y comienza a oscilar. Metafísicamente, se usa para realzar las habilidades físicas, neutralizar la energía negativa, aumentar la confianza, disipar el dolor o miedo, y tratar las enfermedades físicas como artritis, envenenamiento de sangre y enfermedades del corazón. Si planeas usar turmalina para meditación o sus propiedades metafísicas, necesitarás limpiarla con regularidad para restaurar su energía.

Step 1

Coloca la turmalina en un plato de agua. Puedes usar agua fresca o con sal, pero usa agua de mar si decides sumergir tu cristal en agua salada. Sumérgelo durante la noche para una limpieza completa. Para un aumento rápido de energía, sostén la turmalina bajo agua corriente fría por varios minutos.

Step 2

Baña tu turmalina a la luz de la luna llena. Colócala fuera de noche donde se exponga directamente a la luz de la luna. Déjala toda la noche.

Step 3

Entierra el cristal de turmalina en la tierra por al menos 24 horas para restaurar su energía. Marca el punto donde lo enterraste para que lo vuelvas a encontrar.

Step 4

Difumina el cristal de turmalina con salvia o incienso de cedro. Para ello, agita el cristal a través del humo varias veces.

Step 5

Coloca el cristal sobre una cama de cristales de cuarzo o amatista por 24 horas. La energía de la agrupación del cristal ayudará a recargar la turmalina.

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