Cómo hacer una navaja

Escrito por John Albers ; última actualización: February 01, 2018

El mecanismo de apertura de una navaja se ubica entre un cuchillo de gravedad, que utiliza la inercia creada por un giro de la muñeca para desplegar la hoja y un simple cuchillo plegable. A diferencia del de gravedad, una navaja no se abrirá accidentalmente mientras la llevas en el bolsillo, ya que la bisagra le ejerce cierta tensión. Para abrirla, sobresale un pequeño botón metálico del costado de la hoja, cerca de la bisagra. Uno debe mover la uña del pulgar contra el botón para que esto suceda y permite un fácil despliegue con una sola mano, sin los problemas legales asociados con su propiedad. Si bien éstas no son especialmente caras, también pueden construirse desde cero, siempre y cuando tengas las herramientas y los materiales adecuados.

Cómo hacer una navaja en 10 pasos

Coloca el bloque de madera en el torno para que quede de costado a lo largo. El lado de 1 y ½ pulgadas de ancho (2,54 y 1,27 cm), el de apertura, debe señalar hacia arriba.

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Ponte los guantes y las gafas y toma la fresadora. Corta un canal longitudinal a lo largo del centro del lado de la apertura. Éste tiene que ser perfectamente recto. Asegúrate de dejar abierto el extremo inferior del bloque, no cortes a través de éste. El canal debe abarcar toda la profundidad de la broca, que viene de ½ pulgada (1,27 cm) y aparece del otro lado. El extremo superior del bloque, 1 pulgada (2,54 cm), desde la parte superior donde irá la bisagra, debe ser vaciado completamente. Ahora tienes la apertura básica en la que encajará el cuchillo.

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Utiliza la herramienta dremel con una broca de lijado muy gruesa, para redondear todas las esquinas exteriores de la madera, dándole la forma y los contornos que desees.

Corta una marca utilizando la herramienta dremel en el extremo de la bisagra del mango, contra el lado de apertura. Debe formar un semicírculo interior justo donde pondrías tu pulgar si estuvieras sosteniendo la navaja. Esto es para que la base desafilada de la hoja esté parcialmente visible y el botón que facilita la apertura no tenga obstrucciones.

Haz 2 agujeros a través de los lados planos del mango. Uno debe estar centrado a ½ pulgada (1,27cm) de la parte superior, mientras que el otro debe estar igual pero en la parte inferior. Allí será donde la hoja y el resorte de lámina serán colocados luego.

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Lija y alisa el mango a tu satisfacción y luego sella la madera aplicando una capa de barniz o tinte. Deja el mango a un costado mientras se seca.

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Mantén los lados de la pieza de acero virgen, que será la hoja de la navaja, contra la piedra de afilar para desgastar el metal hasta que tenga el tamaño y la forma que desees. Sostenla firmemente o la piedra golpeará la hoja de tus manos de vuelta hacia ti. También ten en cuenta que habrá un montón de chispas. Sugiero hacer una hoja de filo único que lentamente se curve hasta un punto a lo largo del reverso. La primera pulgada de la pieza no debe ser trabajada, sino dejada tal como está. Esta parte estará en la bisagra y no se extenderá del mango. Sin embargo, puedes redondear un poco las aristas traseras para hacer que la apertura sea un poco más fácil.

Utiliza el taladro para colocar un agujero centrado a ½ pulgada (1,27cm) de la base para que corresponda al orificio de la bisagra en el mango. Coloca un segundo agujero más cerca del borde de la hoja y otro ½ pulgada (1,27cm) más adelante. Usa el martillo para ubicar el pasador de la navaja en su lugar, para que haya un botón que sobresalga de ambos lados. Estos son normalmente clavados en los mangos de las navajas para mantenerlas en su lugar y se pueden encontrar en ferreterías bien surtidas.

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Coloca la cuchilla en la bisagra del mango ya seco y gira uno de los tornillos en su lugar. Está bien si se abre y se cierra sin ninguna tensión. Todavía no has creado la parte del bloqueo de tensión de la navaja.

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Haz un agujero en la base que se corresponda con el otro orificio en el mango. Desde allí, mantén el apoyo del resorte contra una superficie de trabajo plana y duradera y golpéala con un martillo varias veces, hasta que el resto del resorte se doble ligeramente hacia adelante de la base. Monta ésta en la empuñadura para que la longitud de la lámina de metal apriete contra el costado de la hoja. Esto proporcionará la tensión suficiente para mantener la navaja cerrada hasta que desplaces el botón. Cuando la hoja se abra, el otro extremo de la lámina debe trabarse en su lugar detrás de la bisagra de la hoja, manteniendo la navaja abierta. Para cerrarla, simplemente presiona el pulgar hacia abajo en el lado de la lámina, para correrlo del camino de la misma.

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