Cuando la buena comida se pone mal: 12 signos de que la comida se echó a perder

La nariz sabe. Tal vez ya no uses este sentido para cazar, pero el olor es un gran indicador del deterioro de los alimentos.

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A nadie le gusta comenzar el día con un caso de intoxicación alimentaria. Los distintos alimentos se echan a perder a ritmos diferentes y de formas diferentes y si bien los químicos están desarrollando una prueba con una "tira reactiva" que inmediatamente detectará las bacterias que causan enfermedades en los alimentos, por ahora lo único seguro es apegarse al dicho: "Cuando estés en duda, tíralo". Si un alimento en particular está al borde de descomponerse, lo último que debes hacer es probarlo, ya que una sola mordida de una comida rancia te puede enviar al hospital.

Overview

Pescado

Si el pescado tiene un olor muy fuerte significa que se echó a perder.

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Una broma famosa de Benjamín Franklin decía: "El pescado y los visitantes huelen a los tres días". Cuando el pescado se echa a perder, generalmente desarrolla un olor muy fuerte, pero para el que ya tiene un olor penetrante cuando está fresco debes usar los ojos como un sistema de respaldo. Busca una decoloración o una coloración opaca. Si el pescado se ve amarronado, amarillento o grisáceo, aunque sea sólo alrededor de los bordes, es momento de eliminar el alimento.

Huevos

Con el fin de probar si los huevos están frescos debes ponerlos en un tazón con agua para ver si flotan.

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Existe una razón por la cual a la gente de mal vivir se la describe como "huevos podridos". Estos se pueden ocultar detrás de sus cáscaras inmaculadas, pero si usas un huevo podrido en una receta puede haber una célula durmiente de salmonela. Afortunadamente, todo lo que necesitas para probar la frescura de un huevo es un tazón con agua y un poco de tiempo. Coloca los huevos sin romper en el tazón y observa. Los más viejos permiten que el aire se filtre a través de su cáscara porosa y por lo tanto o bien flotarán o se pararán en el fondo del tazón.

Bistec

El atractivo de un buen bistec es lo suficientemente tentador como para que las personas se arriesguen con un corte de carne con el cual no se encuentran totalmente seguros, pero las llamas de tu parrilla no son una panacea y la carne que no se ha guardado en forma adecuada está poblada de microorganismos peligrosos, tales como el E. coli y la salmonela. Echa un vistazo a los colores. El gris puede ser el tono de moda para el otoño pero definitivamente no luce saludable en la carne. Además, debes olerlo, ya que el bistec rancio tiene un olor que le hace honor a su nombre. Si aún no estás seguro (ni determinado) deja que tus dedos hagan el trabajo ya que la carne que se echó a perder tiene una textura viscosa que debería ayudarte a tomar la decisión.

Cerdo

El cerdo tiene un color rosado cuando está fresco.

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Se dice que los productos de cerdo son más magros que nunca y el cerdo ostenta el título de ser la carne más vendida en el mundo. Dicho esto, es necesario agregar que el cerdito se puede poner mal y cuando lo hace, lo hace con una venganza. Realiza la misma prueba de olor, vista y tacto que has hecho con la carne para comprobar la frescura del cerdo. Debe oler levemente a sangre, no a moho, y debería se rosado, no rojo oscuro ni decolorado, tampoco debería tener una capa viscosa.

Carnes frías

Las carnes frías también son susceptibles al deterioro.

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Ya sean preenvasadas o recién cortadas en la cortadora, todas las carnes frías son susceptibles al deterioro. Si está envasada (y sin abrir) la carne fría debería mantenerse fresca durante dos semanas, mientras que la que ha sido cortada tiene una vida útil mucho más corta, debido a su exposición al aire exterior. Usa tus sentidos (incluyendo el sentido común) --la carne fría que se ha arruinado tendrá una coloración sospechosa, se sentirá viscosa y tendrá un olor raro que a tu estómago no le agradará.

Pollo

No se puede guardar el pollo crudo en el refrigerador por más de 48 horas.

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El pollo rancio es una bomba de tiempo en tu cocina. No debes conservar el pollo crudo en el refrigerador por más de 48 horas, ni comer pollo congelado después de los seis meses de conservación. El pollo podrido tiene un olor agrio o huele en forma similar al amoníaco. Si presenta decoloración o una textura viscosa también son indicadores de que debes ordenar que te lleven comida a tu casa.

Papas

Debes guardar las papas en un lugar oscuro y húmedo.

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"Papa podrida" puede ser puede ser un gran nombre para una banda de garage de Irlanda, pero no es algo que deseas poner en el plato de la cena. Esta verdura versátil dura más tiempo si se guarda en un lugar fresco y oscuro, pero se debe comprobar en forma intermitente. Cuando una papa se echa a perder provocará que el resto siga el mismo camino. Aprieta una papa, si está firme, se puede comer pero si cede y si está suave y blanda, tírala. Mira los brotes y huele, si está podrida tendrá un olor inconfundible a humedad.

Lechuga

La lechuga fresca es de color verde.

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Esta amiga de los sándwiches y de las ensaladas tiene cerca de una semana de vida útil en el refrigerador. Busca signos de marchitamiento y oscurecimiento --la lechuga fresca debe ser de color verde o púrpura rojizo, dependiendo del tipo. También debes constatar que no haya una hinchazón o humedad en la bolsa que contiene la lechuga.

Mantequilla de maní

La mantequilla de maní tiene un alto contenido en grasa.

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El alto contenido en grasa de la mantequilla de maní te asegura que no quedará mohosa, pero al igual que otros aceites puede quedar rancia con el tiempo. Verifica la fecha de vencimiento y huélela bien --si huele a que está pasada entonces tírala en un santiamén.

Yogur

El yogur se hace con la fermentación de las bacterias de la leche.

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El yogur es un producto lácteo producido por la fermentación bacteriana de la leche, por lo que esencialmente es un alimento que se echará a perder. Los signos reveladores de su deterioro son un olor extraño, esporas de moho o una textura grumosa que no tiene nada que ver con la fruta que tiene mezclada.

Queso crema

Es mejor consumir el queso crema fresco.

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A diferencia de los quesos curados, elaborados con molde como el Gorgonzola y el Roquefort, es mejor consumir el queso crema fresco. Deséchalo si se pone verde o se forma moho y verifica la fecha de vencimiento; una vez abierto, el queso crema se debe usar antes de los diez días.

Fresas

Las fresas deben sentirse firmes al tacto.

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Esta fruta deliciosa tiene la fama de echarse a perder rápidamente. Vigila cualquier cambio en el color y busca manchas velludas de moho blanquecino o manchas marrones. Las fresas maduras deben ser firmes al tacto y tener un color rojo liso.

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