Cómo ablandar el caucho en los limpiaparabrisas

Escrito por Larry Parr ; última actualización: February 01, 2018
Hemera Technologies/AbleStock.com/Getty Images

Las escobillas del limpiaparabrisas no sólo retiran el agua de lluvia del vidrio, sino que también ayudan a proporcionar un área de visión clara para el conductor; por lo tanto, mantenerlos funcionando y en plena forma es importante. Sin embargo, el endurecimiento de la goma puede reducir su eficacia. Este endurecimiento ocurre naturalmente con el tiempo, ya que las escobillas están expuestas a los elementos solares y otros. Si la goma en las hojas de los limpiaparabrisas se ha endurecido, hay algunas cosas ayudarán a restaurar su utilidad.

Levanta el brazo del limpiaparabrisas, lo que te dará un fácil acceso a las escobillas.

Inspecciona que no haya caucho agrietado o roto. Si cualquier parte de la escobilla de goma está rota o fracturada, entonces debes sustituirla.

Pon una pequeña cantidad de vinagre en un paño y frota suavemente a todo lo largo de las dos escobillas de goma del limpiaparabrisas. Limpia las escobillas dos veces, con cuidado, asegurándote de que el vinagre limpie las hojas y que las empape.

Humedece otro paño con agua y limpia suavemente a lo largo de la goma de las escobillas para eliminar cualquier exceso de vinagre. Limpia con un paño seco para secar la goma.

Sumerge un paño en vaselina y limpia a lo largo de la goma de cada escobilla, asegurándote de que la vaselina tenga oportunidad de penetrar en el caucho. No limpies las escobillas inmediatamente, permite que la vaselina se seque al aire durante al menos 10 minutos.

Baja los brazos del limpiaparabrisas. El caucho ha sido ahora tratado y debería funcionar apropiadamente para varias otras lluvias.

Consejos

Limpia el parabrisas entero con vinagre, seguido de agua y jabón, para eliminar la grasa y la cera que se haya acumulado con el tiempo.

Advertencias

Evita la vaselina en el parabrisas. Si ésta entra en contacto con el parabrisas, límpiala con un paño humedecido con vinagre, seguido de un limpiado vigoroso con un paño humedecido con agua.

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