Después de usar maquinillas de afeitar, algunas personas presentan irritación excesiva en la cara o las piernas. En la mayoría de los casos, la fricción de la navaja contra la piel es lo que causa las molestias, sin embargo muchos otros usuarios pueden ser alérgicos a la capa de níquel que recubre la superficie de las maquinillas regulares de afeitar.

Alergia al níquel

La alergia al níquel es común. De acuerdo con Nature.com, entre el 5% y el 10% de los hombres que viven en los países industrializados son alérgicos al níquel, lo mismo que entre el 10% y el 20% de las mujeres. Es posible que en cualquier momento de tu vida desarrolles una alergia de este tipo que dure varios años o que se vuelva crónica y permanente; esto dependiendo de tu respuesta inmune, apunta la New Zealand Dermatological Society (Sociedad Dermatológica de Nueva Zelanda).

Níquel en navajas de afeitar

El níquel se utiliza en una amplia gama de artículos con los que entras en contacto cada día, asegura the Nickel Institute (Instituto del Níquel). Este elemento se considera el quinto más común en la tierra. Debido a que resiste la corrosión y las altas temperaturas, se utiliza para recubrir joyería, ollas y sartenes, llaves de agua, relojes, baterías y muchos otros objetos metálicos que necesitan protección contra el calor y el agua, incluyendo las navajas de afeitar. Las cuchillas tanto de las maquinillas manuales como de las eléctricas contienen pequeñas cantidades de níquel, apunta the Nickel Institute (Instituto del Níquel).

Efectos

Si entras en contacto con un objeto de níquel y eres alérgico, tu piel puede presentar picor intenso, explica the New Zealand Dermatological Society (Sociedad Dermatológica de Nueva Zelanda). Tambíen quizá muestre enrojecimiento e incluso ampollas. Si desarrollas dermatitis crónica por contacto con el níquel, tu piel puede mancharse, resecarse o engrosarse. Para saber con seguridad si tienes una alergia, la Universidad de Columbia recomienda ver a un dermatólogo para llevar a cabo una prueba "de parche".

Pon a prueba tu maquinilla de afeitar

Es fácil averiguar si tu maquinilla de afeitar contiene níquel. Sólo debes conseguir una prueba de dimetilglioxima en una farmacia o con tu dermatólogo. La prueba consta de dos botellas de líquido que se mezclan entre sí. Después, deberás colocar el líquido en la maquinilla de afeitar. Si se vuelve rosa, la afeitadora contiene níquel.

Tratamiento

Si eres alérgico al níquel y tu afeitadora lo contiene, sólo cambia la navaja. De acuerdo con el reporte de un caso sobre alergias al níquel en navajas de afeitar (1997), un paciente con alergia comprobada mejoró rápidamente cuando simplemente dejó de usar la afeitadora en cuestión. El médico puede prescribir esteroides o ungüentos para tratar un brote o cualquier otra forma alérgica generada por contacto. Si tienes sensibilidad a este metal, lo mejor es que lo evites de manera permanente (incluyendo el de las maquinillas de afeitar). Esta es prácticamente la única opción a largo plazo para evitar reacciones alérgicas.