Cómo arreglar el cierre de un bolso

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Los bolsos son los accesorios útiles que te ayudan a llevar varios artículos de primera necesidad, tal como una billetera con tu identificación. La mayoría de los bolsos tienen cierres que protegen los artículos dentro de la bolsa, pero si el cierre se rompe o se atasca, termina siendo inútil. Que un profesional lo reemplace puede ser costoso y muchas veces el problema es auto-reparable. Afortunadamente, hay varios métodos sencillos que te permiten ajustar y reparar tu cartera con cierre, si se trata de un cierre atorado o un problema con los dientes de éste.

Cierre trabado

Localiza cualquier obstrucción en el cierre, como una sustancia extraña atrapada allí, o pedazos de tela o de pelos enredados en el cierre.

Tira del cierre para abajo con cuidado para eliminar la obstrucción. Tira de la tela o sustancia extraña para sacarla del cierre.

Cierra por completo la cremallera. Ábrela y ciérrala para asegurarte de que funciona. Empuja la tela hacia el interior del bolso de manera tal que no se trabe de nuevo.

Bajando el cursor del cierre

Localizar la parada del cierre en el extremo. Una parada que ya no funciona o que está rota puede ser la causa de que el cursor del cierre se salga de los dientes.

Enhebra una aguja. Cose una nueva parada desde un lado de la tela del cierre hacia el otro.

Cose varias capas de hilo para crear una barrera donde el cursor pueda parar. Prueba el cierre para asegurarte de que ya no se sale de los dientes.

Cierre abierto

Abre con fuerza la parte de atrás del cursor del cierre con destornillador plano. Mueve el cursor sobre el cierre hasta antes de donde empieza la zona dividida.

Dobla la parte inferior del cursor con una pinza aplicando una presión uniforme sobre éste.

Abre y cierra la cremallera deslizándola sobre el área previamente dividida. Afloja el cursor de la cremallera con un destornillador plano, si está demasiado ajustado, o dóblalo con pinzas para ajustarlo.

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