Step 1

Vierte alcohol desinfectante en una bola de algodón y limpia la uña. Esto quitará los residuos oleosos y te asegurará que la uña está seca.

Step 2

Aplica gel ultravioleta con el cepillo o con el aplicador. Asegúrate de esparcirlo en forma homogénea sobre toda la uña pero evita colocarlo sobre la cutícula. Espera a que se cure, de acuerdo a las instrucciones del envase.

Step 3

Corta el papel de fibra con la forma de la uña y ponlo sobre la misma, cubierta de gel. Aplana las arrugas o las burbujas colocando un trozo de celofán sobre la parte superior y luego alisa con los dedos. Espera a que el gel se seque.

Step 4

Aplica otra capa fina de gel sobre la uña y espera a que se seque. Límala con una lima de uñas y arrégalas como lo haces normalmente. Puedes aplicar esmalte sobre el parche si así lo deseas.

Step 5

Recorta la uña en forma regular para evitar que vuelva a rasgarse. Esto es particularmente importante en las uñas de los pies, que se enganchan fácilmente en las medias o en los zapatos y a menudo reciben impactos cuando te golpeas el dedo. El parche crecerá con el resto de la uña.