Almidón de mandioca

La mandioca es una gran fuente de almidón para la producción, junto con la papa y el maíz. Puedes utilizar el almidón de tapioca tras modificarlo, o puedes utilizar su forma sin modificar. Qué tan adecuado sea un almidón de mandioca para una industria en particular depende de las características físicas y químicas de sus gránulos. Los factores como el tamaño y forma, así también como cuánta amilopectina y amilosa contengan, determinarán su uso.

Composición del almidón de tapioca

El almidón de mandioca se caracteriza por un alto contenido de humedad de hasta 16%, dependiendo de cómo haya sido procesada y almacenada, comparada con el 12% de humedad del almidón producido por otros productos. El almidón de tapioca es conocido por su alto contenido de almidón, de hasta 80%. Éste contiene pequeñas cantidades de proteínas, minerales, fibras dietarias y grasas.

Extracción

Un factor que impacta en la elección de la fuente de almidón es el nivel de facilidad con el cual se extrae, dado en alto contenido de almidón en la planta de mandioca y qué tan puro es. En este aspecto, el almidón de tapioca es superior a los demás almidones, tales como a los que se producen con maíz o arroz. Este producto es también relativamente puro, dado su bajo contenido de proteínas y otros compuestos.

Otras características

El almidón de tapioca se convierte a un estado gelatinoso relativamente rápido cuando se lo cocina en agua, y permanece relativamente fluido una vez se enfría. Esta característica lo hace un atractivo alimento para utilizar en alimentos procesados. La solución tiende a ser estable y no se degenera, como lo haría con almidones producidos a partir de maíz o papa. El almidón de mandioca es conocido por su viscosidad, lo que significa que tiende a ser resistente al flujo. Esto hace que sea adecuado para aplicaciones industriales que requieren de una pasta espesa.