Pérdida de hábitat

El daño humano a los hábitats es la razón principal por la que los animales se encuentran amenazados o en peligro de extinción, explica la Enciclopedia Encarta. Los humanos cortan los bosques, convierten los hábitats deseables en tierras agrícolas y utilizan la tierra para construir edificios o caminos. Esto ha probado ser especialmente problemático en las islas ampliamente pobladas, donde el suministro de madera y tierras agrícolas se ve limitado. Por ejemplo, la explotación humana de los bosques en Madagascar para madera y granjas ha amenazado severamente a la población del lémures, de acuerdo con Animal Planet. Algunas de estas especies en peligro de extinción viven únicamente en Madagascar.

Especies extranjeras

Las especies invasoras extranjeras representan otra amenaza. Los humanos y otros animales pueden accidental o intencionalmente traer especies a un área donde normalmente no existen. Algunas veces estas especies animales se reproducirán rápidamente y conducirán a los animales nativos a la extinción, ya sea comiéndoselos o consumiendo su fuente de alimento. Por ejemplo, las pitones birmanas han amenazado a las especies de aves y roedores indígenas en el sur de Florida, de acuerdo con ScienceDaily.

Exceso de caza

Los animales también pueden estar amenazados o en peligro de extinción cuando otras criaturas, particularmente los humanos y las especies invasoras extranjeras, los cazan y los matan excesivamente. Los humanos cazan animales por su carne, piel y algunas veces los cuernos u otras partes del cuerpo. La paloma migratoria y periquito de Carolina estuvieron en peligro de extinción por la caza y eventualmente se extinguieron, de acuerdo con la Enciclopedia Encarta. La pesca excesiva frecuentemente pone a ciertas especies de peces y otras criaturas marinas, incluyendo algunos tipos de ballenas, en la lista de animales en peligro de extinción.

Clima

Los cambios a largo término en el clima también pueden amenazar o poner en peligro de extinción a los animales. Algunos cambios conllevan a veces efectos impredecibles sobre un ecosistema, provocando potencialmente una reacción en cadena al desaparecer las fuentes de alimentos. Los cambios climáticos pueden destruir hábitats, eliminar Fuentes de alimentos e introducir depredadores competidores. Muchos peces y animales han tenido que moverse a áreas más frescas o más calientes en los años recientes, de acuerdo con World Wildlife Fund. La WWF indica que tales cambios interfieren con las actividades de alimentación de los osos polares y las ballenas, entre otros.

Otras causas relacionadas con humanos

El daño humano al ambiente, particularmente la contaminación del agua, ha puesto muchas especies en la lista de animales amenazados o en peligro de extinción. Los derrames tóxicos, los pesticidas, la radiación, los tiraderos y los incendios pueden destruir hábitats o provocar serios efectos en la salud, lo que algunas veces permanece escondido hasta que los animales dejan huevos o tienen crías. Las especies de animales también pueden enfrentarse a un daño accidental cuando los humanos tratan de eliminar pestes o plantas no deseadas.