Cómo curar un piso de cemento

La clave para el curado adecuado de un suelo de cemento radica en un proceso de curación lento y prolongado.

Thomas Northcut/Photodisc/Getty Images

La clave para el curado adecuado de un suelo de cemento radica en un proceso lento y prolongado, manteniendo el cemento húmedo durante varios días. De hecho, si se desea que un suelo de hormigón se cure a su máxima dureza, se debe mantener húmedo y sin uso durante un mínimo de 28 días. La temperatura ambiente también es importante. Una temperatura ambiente de aproximadamente 72 grados F (22 grados centígrados) es ideal para la curación de un piso de concreto. Obviamente, es imposible mantener una temperatura constante del aire en la mayoría de las situaciones, pero de ser posible, lo ideal es humedecer el suelo de cemento cuando las condiciones meteorológicas promedio se acerquen lo más posible a las temperaturas óptimas.

Step 1

Vierte el piso y haz el acabado según las especificaciones adecuadas para la aplicación específica. Permite que el cemento se seque hasta el punto tal que la superficie no pueda ser dañada por la arpillera, paja o agua.

Step 2

Cubre el suelo con arpillera o paja.

Step 3

Inunda el suelo con agua. Cubre el suelo con agua a por lo menos una pulgada (2,54 cm) de profundidad, asegurándote de que la arpillera o paja se empapen de agua.

Step 4

Controla la superficie del piso cada pocas horas. Dependiendo de las condiciones climáticas, agrega más agua si es necesario para mantener el suelo húmedo y cubierto de aproximadamente 1 pulgada (2,5 cm) de agua en todo momento.

Step 5

Humedece el piso a fondo antes de irte por las noches.

Step 6

Reduce al máximo el peso y el tránsito peatonal durante al menos 72 horas. Cuanto más tiempo se puede mantener el suelo húmedo y sin usar, mejor. Tu suelo de cemento alcanzará el 90% de su resistencia después de 28 días de ser curado con agua.

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