Las glándulas sudoríparas obstruidas fácilmente pueden resultar en crecimientos muy dolorosos que se forman en el cuerpo. Una vez que la glándula se obstruye, la mayoría de la veces por piel grasa o células muertas, continúa secretando sudor y el aceite ahora no tiene salida. Como consecuencia la glándula se hinchará y la infección quedará en el interior. Esto resulta en anticuerpos circulando en el sitio. La axila es un lugar muy común para las glándulas sudoríparas obstruidas, debido a los pliegues de la piel y los numerosos folículos pilosos ubicados en la región. Aliviar glándulas sudoríparas obstruidas requiere un poco de diligencia.

1. Humedece una toallita bajo el agua y quítala cuando esté mojada.

2. Calienta la toalla húmeda en el microondas hasta que esté muy caliente, pero no lo suficientemente caliente como para quemar. La cantidad de tiempo de calentamiento varía dependiendo del microondas. Comienza con 15 segundos y aumenta el calor, según sea necesario. Nunca calientes un paño seco y siempre controla el microondas cuando esté en uso para evitar un incendio.

3. Espolvorea sal sobre la compresa una vez que se caliente a tu satisfacción. La sal ayudará a destapar la glándula sudorípara.

4. Presiona el lado salado de la toallita caliente firmemente en contra de la glándula sudorípara tapada y mantenla en esa posición durante cinco minutos.

5. Seca la axila con un paño suave y coloca una pequeña cantidad de solución de povidona-yodo en la glándula inflamada.

6. Repite varias veces al días hasta que la glándula se haya curado.

   Consejos

   Si la glándula empeora o la hinchazón no baja, puede que necesites seguir con antibióticos para eliminar la infección. Visita a tu médico para un diagnóstico.