Los efectos de las hormonas vegetales sobre el crecimiento y desarrollo de las plantas

Las hormonas vegetales afectan las tasas de crecimiento de las plantas y los períodos de inactividad.

Juergen Bosse/Photodisc/Getty Images

Las sustancias hormonales en las plantas juegan un papel vital en la regulación de los procesos de crecimiento y desarrollo en los órganos de la planta. Cuando es secretada, cada hormona tiene efectos sobre los procesos metabólicos celulares, lo que en última instancia controla todas las áreas dentro del ciclo de vida de la planta. Cuando se secreta en cantidades excesivas o deficientes, pueden desencadenarse alteraciones en los procesos de crecimiento normal o natural.

Efectos de la división celular

El crecimiento y desarrollo de plantas dependen de las diferentes tasas de división celular que tienen lugar dentro de las estructuras vegetales. Según el Servicio de Extensión de la Universidad Estatal de Oregón, las tasas de división celular están reguladas por las cantidades de hormonas secretadas dentro de las diferentes áreas del cuerpo de la planta. Los productos químicos hormonales específicos tales como auxinas y giberelinas afectan el crecimiento de la flor y de la fruta, así como las tasas de alargamiento del tallo. Los procesos de desarrollo de la planta se llevarán a cabo a medida que las actividades de la división celular dan lugar a estructuras diferenciadas que forman las raíces, tallos y hojas, de acuerdo a Biology Online, un sitio de referencia basado en la ciencia. Los procesos de desarrollo se originan en el ADN que codifica las actividades llevadas a cabo por cada célula, que determinan las cantidades y tipos de hormonas necesarias para que ocurra la diferenciación.

Efectos de germinación de las semillas

Los procesos de germinación implican las etapas de crecimiento y desarrollo que tienen lugar en el interior del embrión, que existe dentro de la parte de la semilla de una planta, según el Servicio de Extensión de la Universidad Estatal de Oregón. Estos procesos ocurren a medida que ciertas secreciones hormonales ocurren dentro del compartimento de la semilla. Las giberelinas y citoquininas son dos sustancias químicas hormonales que desencadenan los procesos de germinación de semillas. Ambas hormonas estimulan las actividades de la división celular, que se traducen en el crecimiento del tejido. Cuando se aplican en una forma química sintética, las giberelinas también pueden interrumpir el período de latencia de la semilla natural y provocar el comienzo de los procesos de germinación. El ácido abscísico, otra hormona sintética química, provoca períodos de dormancia en las semillas y previene que se produzca la germinación.

Efectos de maduración

En el caso de las variedades de plantas frutales, la secreción de hormonas desempeña un papel importante en cómo las estructuras de las plantas responden a las condiciones externas. Según el Servicio de Extensión de la Universidad Estatal de Oregón, las secreciones hormonales a menudo proceden de una única parte de la planta y circulan a través de otras zonas del cuerpo de la planta. En efecto, diferentes productos químicos hormonales actúan sobre ciertos tipos de tejido. Los efectos de maduración se producen a medida que las hormonas desencadenan procesos fisiológicos dentro de las células que componen las hojas, el tallo y las estructuras frutales. Las hormonas involucradas en el proceso de maduración incluyen el etileno y el ácido abscísico. Las secreciones de etileno aumentan la velocidad en que la que la fruta madura, mientras que el ácido abscísico desencadena el período de reposo vegetativo de la planta, causando la muerte de las células y de los tejidos vegetales.

eHow en espanol
×