¿Cómo evitar ser arrogante?

Recuerda que tu vida depende inevitablemente de las contribuciones de los demás.

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Arrogancia, engreimiento, altanería, presunción –llámale como quieras, la arrogancia es un rasgo de personalidad altamente desagradable. Entre más arrogante es una persona, es menos probable que respete los pensamientos y opiniones de los demás. En combinación con un alto concepto de sí mismo, este rasgo de personalidad inevitablemente alejará a las personas y tendrá un impacto negativo tanto en tu trabajo como en tu vida personal. Si eres consciente de este problema, puedes mejorar tus interacciones con los demás y evitar dar la impresión de ser arrogante mediante las siguientes sencillas medidas correctivas.

Step 1

Sé cortes con los demás. Es fácil descuidar los modales si estás sumergido en ti mismo. Dale las gracias a los demás, se agradable al saludarlos, ofrece tu asiento, sé amable. El ser cortés te ayudará a evitar parecer arrogante y egocéntrico.

Step 2

Haz cumplidos. Halaga a los demás sobre sus logros y felicítalos por un trabajo bien hecho. Asegúrate de que tus halagos sean significativos y sinceros. Evita cumplidos vanos y sin importancia como "¡Linda camisa!".

Step 3

Haz preguntas y permite que los demás contribuyan. Es posible que sientas que lo que tú tienes que decir tiene más importancia, pero recuerda que los pensamientos y opiniones de los demás son tan importantes y significativos como los tuyos. Acepta las contribuciones de los demás sin desvalorizarlas automáticamente. Haz preguntas valiosas y muestra interés en lo que los demás tienen que decir.

Step 4

Admite las equivocaciones. Todos cometemos errores, y admitirlos te ayudará a evitar parecer arrogante. Una racha de arrogancia puede hacer que parezca tentador negar cualquier equivocación o culpar a los demás por ella, pero recuerda que la capacidad de admitir tu error es un signo de buen liderazgo y seguridad.

Step 5

Adopta un punto de vista más amplio. Cuando sientas que eres lo mejor de lo mejor, recuerda que existen muchas otras personas con habilidades y capacidades que pueden competir con las tuyas. Sin importar cuáles sean tus talentos, no podrías sobrevivir sin las contribuciones de los demás, sean las de tu familia, amigos o incluso gente completamente desconocida. Recuerda que nadie es perfecto y que tú también tienes defectos.

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