Desengrasante casero para el lavado

Los desengrasantes caseros estimulan el poder de limpieza de los detergentes comunes.

Jupiterimages/BananaStock/Getty Images

Como lo dice el nombre, un desengrasante es un producto que remueve la grasa. Cuando se lo incorpora a la rutina de lavado, ayuda a quitar la grasa y el aceite de las telas. También remueve los residuos de los jabones que dejan muchos de los detergentes, lo que hace que tengas ropas más frescas y limpias. Aunque tienes desengrasantes para lavar ropa en las tiendas, puedes usar elementos comunes que tienes en la casa como alternativas caseras y más baratas.

Sales

Técnicamente una sal es un complejo formado por una reacción química entre un ácido y una base. Una de las sales más comunes del mundo es el bicarbonato de sodio, o bicarbonato de soda. Cuando se lo disuelve en agua, crea una solución que limpia, desinfecta y desodoriza sin el uso de químicos duros. Para limpiar cargas particularmente sucias, agrega 1/2 taza de bicarbonato de sodio al ciclo del lavado para aumentar la potencia de tu detergente diario. Los químicos de la soda disuelven los residuos grasos y suavizan el agua, lo que resulta en colores brillantes y blancos más blancos. Trata las manchas de grasa rebeldes con una pasta hecha de bicarbonato de soda y agua. Frota la mancha para que la pasta se meta entre las fibras y entonces lava la prenda como de costumbre.

Ácidos

Las sustancias ácidas disuelven una gran variedad de complejos, incluyendo la grasa y el aceite. El vinagre blanco destilado está hecho de ácido acético. Aunque el vinagre casero no es una solución tan potente, el ácido del vinagre corta las grasas y disuelve los residuos de aceite. Agregando 2 tazas de vinagre blanco destilado al ciclo de lavado no solamente te ayuda a remover la grasa, mata la bacteria que pueda estar presente, incluyendo el olor que causan los microbios generalmente asociados con la tela de los pañales y las manchas de transpiración. Además el uso del vinagre en el ciclo de enjuague elimina la estática y mantiene a la ropa suave y fresca, reduciendo la necesidad de un suavizante de ropa.

Bases

Las sustancias alcalinas son conocidas como bases. Son agentes limpiadores poderosos capaces de disolver la grasa y las proteínas. El amoníaco es una base común casera conocida por su aroma penetrante. Aunque no produzca el aroma más agradable, es excelente para quitar la grasa de la ropa. Simplemente espera que la lavadora se llene y, entonces, agrega una 1/2 taza de amoníaco al lavado. Sacarás la ropa fresca y limpia, sin rastros del olor a amoníaco. Sin embargo, ten cuidado cuando lo uses, particularmente cuando lo agregas al lavado. Nunca mezcles amoníaco con lejía, o cualquier otro producto que contenga cloro; esa combinación de químicos produce vapores tóxicos que pueden ser mortales.

Tensoactivos

Los tensoactivos rompen los residuos de la grasa atrayéndolos químicamente, quitándolos efectivamente de las superficies duras y de las telas. Los jabones para vajillas contienen tensoactivos que hacen maravillas cortando las grasas. Para crear un desengrasante sencillo para todo propósito, mezcla 1/2 taza del detergente líquido con 1/2 taza de agua. Vierte la solución sobre cualquier prenda engrasada y frota la superficie ligeramente para que la solución se mezcle en las fibras. Espera 10 minutos, enjuaga y lava como lo haces siempre. Para mejorar la efectividad de una fórmula particular, agrega 2 cucharaditas de aceite de naranja.

eHow en espanol
×