Los lentes fotocromáticos, ¿pueden perden su capacidad de oscurecer?
Los lentes fotosensibles, también conocidos como lentes de transición, utilizan los rayos ultravioletas del sol para realizar su proceso de cambio de color. Una reacción química incitada por los rayos permite que los lentes fotocrómicos oscurezcan suavemente el brillo, aliviando la luz natural antes de que llegue a los ojos. A pesar de que se utiliza una tecnologías avanzada en su creación, los lentes fotosensibles plásticos (los estándar de la industria) están sujetos a altibajos en su rendimiento, y en última instancia, pueden perder parte de su capacidad de tinción con el tiempo.
Duración
La luz ultravioleta que provoca el proceso de oscurecimiento de las lentes fotocromáticas es también el principal factor en el deterioro de su funcionamiento. Debido a esto, la frecuencia de uso puede desempeñar un papel determinante sobre la vida útil de las lentes fotocrómicas de plástico. Un par de lentes fotosensibles plásticos puede comenzar a perder su capacidad de oscurecer después de uno a cuatro años. Los consumidores que usan lentes fotosensibles plásticos deben reemplazarlos cada dos años para obtener un rendimiento óptimo.
Vidrio fotosensible
Las lentes fotocrómicas originales (creadas en la década de 1960) eran de vidrio y estaban hechas con un proceso químico diferente conocido como "haluro de plata" para lograr el mismo resultado. El haluro de plata involucrado en el cambio de color de los cristales era distribuido por toda la lente de vidrio. Este proceso, el mismo utilizado en la fotografía tradicional, permitía que los efectos de aligeramiento y oscurecimiento continuaran sin deterioro. La popularidad de estos lentes era el resultado directo del éxito de la aplicación del haluro de plata.
Lentes fotosensibles plásticos
Dado que las lentes de plástico han sustituido a sus homólogos de vidrio, un nuevo tipo de proceso se utiliza para hacer lentes fotosensibles. El proceso "hélice en espiral" ha sustituido al proceso anterior y se implementa en diversas variaciones. El proceso más popular es embeber, en el cual los fabricantes implantan una resina fotocrómica desde las capas más externas de las lentes hasta aproximadamente 0,15 milímetros de profundidad. El recubrimiento por inmersión es un método menos eficaz, donde se recubren las superficies frontal y posterior con los productos químicos necesarios para incitar el oscurecimiento de la lente. El proceso con los efectos de más larga duración se conoce como "en masa" y se logra cuando las moléculas causantes de la reacción se distribuyen a lo largo de la totalidad de la lente.
Otros factores que inhiben el oscurecimiento
Los nuevos lentes fotocrómicos plásticos tienen una pequeña demora antes de alcanzar su máximo rendimiento; se requieren 30 minutos de exposición ultravioleta en cinco ocasiones distintas antes de que las lentes funcionen correctamente. La temperatura también juega un factor importante en la capacidad de cambio de color. Las lentes se prueban a temperaturas bajo los 70 grados F (21 grados C) y las temperaturas más cálidas disminuyen su rendimiento, mientras que las temperaturas más bajas lo mejoran. Ya que los lentes fotocromáticos oscurecen la luz ultravioleta, el uso dentro de vehículos con un parabrisas que bloquea los rayos UV impedirá los efectos deseados.
