Cómo ser un mercenario

Has intentado trabajar en principio, pero finalmente te diste cuenta de que lo que realmente te interesa es el dinero. Tu verdadera vocación es ser un mercenario. Los gobiernos y las empresas de todo el mundo están buscando a gente que a quienes puedan pagarles por hacer su trabajo sucio. Demuestra que eres digno del trabajo y que puedes unirte a las filas bien escondidas de los mercenarios.

Entra durante un período en el ejército. Familiarízate con las zonas de combate y con la forma en que operan. Acepta cualquier entrenamiento especial que te ofrezcan, especialmente los relacionados con el manejo de armas. Observa a los oficiales de alto rango mientras realizan sus funciones. Aprende todo lo que necesites saber para convertirte en un hombre experto del ejército.

Repudia todas las filiaciones políticas y nacionales. Cuando te conviertes en un soldado por contrato, no puedes dejar que tus propias creencias se interpongan en el camino. Conviértete en una persona sin país ni causa para que sea más fácil considerar cada oferta.

Distánciate de todos tus conocidos. Los mercenarios actúan bajo tierra y no puede ser relacionado con gente que te llame para ver dónde estás en cada momento. Esto también te protege cuando te metes en un lío, ya que el enemigo no sabrá a quién acudir después de hacerte hablar.

Publicita tus servicios. Publica un aviso en la revista "Soldier of Fortune" donde indiques que estás buscando trabajo. Deja en claro que tu experiencia será para el mejor postor.

Preséntate a trabajar y comienza a construir tu reputación. Completa las tareas asignadas de forma rápida y limpiamente. Niégate a realizar un trabajo adicional antes de renegociar los términos de tu contrato.

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