Historia

La relación entre cristianos y musulmanes ha sido dañada por una larga historia de interacciones con frecuencia violentas y sangrientas, comenzando con la conquista musulmana del Imperio Romano de Oriente, o Bizantino, durante el siglo VII. Desde las Cruzadas y la Reconquista Española, hasta las guerras coloniales del siglo XX y la creación del estado israelí, los ejércitos y misioneros del occidente cristiano, y los musulmanes han estado involucrados en períodos de competencia geopolítica continua y en francos conflictos bélicos. Esta historia ha provocado un ambiente de desconfianza mutua y ha dado forma a estereotipos y percepciones culturales que avivan las tensiones actuales.

Religión y política

Aunque el fervor religioso tanto de los europeos cristianos como de los musulmanes desempeñó un papel relevante en los primeros conflictos, el pensamiento político de occidente finalmente se separó y desarrolló predominantemente dentro de tendencias no religiosas o seculares. En Estados Unidos y Europa Occidental evolucionaron los modernos estados-nación que valoran la libertad personal y la separación entre iglesia y estado. Las naciones musulmanas generalmente conservan o reincorporan tradiciones islámicas más antiguas que valoran la síntesis de religión, cultura, sociedad y gobierno. Finalmente estos distintos caminos generan visiones opuestas del mundo que dan lugar a ideas erróneas mutuas y actúan como barreras que impiden un diálogo constructivo.

Cultura

Los efectos de los conflictos religiosos y políticos se encuentran profundamente enraizados en las dos culturas. En su artículo "El Cristianismo y el Islam" el profesor Jerzy Zdanowski escribe: "Dante, en la 'Divina Comedia' condenó a Muhammad a terribles torturas, las cuales merecía por ser un hereje". Las percepciones mutuas han dado forma a perspectivas muy diferentes, por un lado, a una cultura moderna y secular, y por otro, a otra cultura religiosa y de gran tradición. Estas perspectivas se extienden a las diferencias reales o percibidas que se relacionan con aspectos como el ejercicio de la libertad personal, el crimen y el castigo, o el papel de la mujer en la sociedad.

Trauma y manipulación

Las memorias y traumas colectivos compartidos, generados a partir de una historia de colonización y conflictos han generado las visiones contemporáneas. Los impactos sociales y económicos de la moderna colonización europea en Oriente Medio, por ejemplo, refuerzan las percepciones negativas que tienen que ver con los motivos de los musulmanes occidentales. En una cultura dominada por una tradición islámica y una memoria ancestral, esas percepciones se convierten fácilmente en grandes ideas de conflicto histórico y religioso entre el Cristianismo y el Islam. Tales opiniones constituyen la base de fundamentalistas, extremistas, y en el caso extremo, de los terroristas, cuyas palabras y acciones provocan dramáticas respuestas emocionales y predecibles en Occidente.