Según los Centers for Disease Control and Prevention, casi 4 millones de mujeres dan a luz cada año, y un tercio de ellas sufren complicaciones relacionadas con el embarazo, añade KidsHealth.org. A lo largo de tu embarazo, es probable que pases horas y horas preocupándote por el crecimiento y desarrollo de tu bebé. Tú y tu pareja pueden ayudar a reducir el riesgo de problemas y aliviar algo de la preocupación por el cuidado apropiado tuyo y de tu bebé en desarrollo.

Cuidado prenatal

Las visitas prenatales aseguran que tu bebé se está desarrollando adecuadamente y pueden ayudar a detectar problemas relacionados con el embarazo. Por lo general, verás a tu médico durante tu embarazo: una vez al mes de la semana 4 a la 28, dos veces al mes desde la semana 28 a la 36 y una vez a la semana por el resto de tu embarazo. Las visitas prenatales generalmente consisten en tomar tu presión arterial, controlar la frecuencia cardiaca de tu bebé y la medición de tu abdomen para asegurarse de que tu bebé está creciendo adecuadamente. También deberás hacerte pruebas de rutina para comprobar si tienes anemia, diabetes gestacional o infecciones. Estas visitas son el mejor momento para hacer cualquier pregunta a tu médico o expresar cualquier preocupación que tengas.

Nutrición

Lo que comes durante el embarazo es lo que tu bebé está ingiriendo, así que es importante elegir sabiamente los alimentos. Haz que tu pareja te ayude a planificar comidas y bocadillos saludables. Dependiendo de tu peso y el trimestre donde te encuentras, come entre 6,5 y 10 onzas de granos por día, con al menos la mitad de granos enteros. Necesitas entre 4,5 y 6 tazas de frutas y verduras. Tu bebé necesita proteínas para crecer, y la carne, aves, pescado, huevos y frijoles son sus mejores fuentes; come entre 5,5 y 7 onzas de este grupo de alimentos. El pescado es una excelente fuente de ácidos grasos omega-3, que son fundamentales para el desarrollo del cerebro de tu bebé, pero evita los pescados altos en mercurio, como el pez espada y el tiburón. Consume 3 tazas de productos lácteos cada día para fortalecer los huesos y los dientes del bebé. MayoClinic.com recomienda tomar una vitamina prenatal diaria y beber mucha agua.

Fumar

El CDC indica que fumar durante el embarazo puede provocar un parto prematuro, defectos de nacimiento y muerte infantil. Fumar también puede hacer más difícil que quedes embarazada, así que si fumas, lo mejor es dejar de fumar antes de empezar a tratar de tener un bebé. Si eso no ocurrió, déjalo inmediatamente una vez que sepas que estás embarazada. El humo de segunda mano puede hacer que tú y tu bebé por nacer enfermen y puedes provocar un parto con un bebé de bajo peso. Si estás embarazada, tu pareja debe dejar de fumar, y debes evitar los lugares llenos de humo.

Elementos a evitar

March of Dimes afirma que el plomo es perjudicial para las mujeres embarazadas. El plomo se utilizaba en la pintura, por lo que si vives en una casa vieja y la pintura se está desmoronando, contrata a un experto para eliminarla y volver a pintar o haz que tu pareja vuelva a pintar la casa. El plomo también puede estar en la plomería, el maquillaje, los suministros de artes y oficios y productos enlatados y dulces de otros países. Las mujeres embarazadas deben evitar los pesticidas, disolventes, productos de limpieza tóxicos y plásticos que contienen bisfenol A (BPA). Haz que tu pareja limpie la caja de arena si tienes gatos. De lo contrario, podrías contraer toxoplasmosis, una enfermedad que causa defectos de nacimiento. FamilyDoctor.org sugiere evitar jacuzzis y saunas, ya que pueden causar abortos involuntarios, y no consumas alcohol o drogas durante el embarazo.