Cómo hacer una almohada anti-ronquido

Las almohadas de todo el cuerpo le quitan presión a tus articulaciones.

Creatas Images/Creatas/Getty Images

El ronquido se produce cuando los tejidos de tu garganta vibran mientras respiras al dormir. El hecho de roncar en sí no significa que tu salud corre riesgos, pero puede ser una señal de apnea del sueño, una condición más grave en la que una persona no recibe el oxígeno adecuado mientras duerme. Aunque roncar no sea un tema de la salud, puede crear una importante molestia a quienes duermen alrededor de ti. Si tus ronquidos interrumpen el sueño de los demás, pero no es tan grave como para requerir una intervención médica, crea una almohada anti-ronquidos para reducir el ruido a la hora de dormir.

Step 1

Une mediante una costura los extremos de dos almohadas para cama de tamaño común para formar una almohada para el cuerpo. Si prefieres no modificar las fundas, simplemente coloca una sobre cada extremo de la almohada del cuerpo. Cose una tira de lazos de sujetadores de tela a lo largo del borde interior de la abertura de una segunda almohada para ayudar a mantenerlas en su lugar logrando que sean fáciles de retirar para lavarlas.

El sitio web de University of Maryland Medical Center sugiere que duermas de costado si roncas, porque esto evita que tu lengua caiga hacia tu garganta, creando una obstrucción. Las almohadas de todo el cuerpo hacen que el hecho de dormir sobre un costado de tu cuerpo sea más cómodo, brindando apoyo a tu tronco y a tus piernas.

Step 2

Mejora tu almohada agregando una cuña de espuma para cama por debajo de ella para levantarla a la altura de 4 pulgadas (10 cm) recomendada en el sitio web de la Clínica Mayo. Mide y corta el bloque de espuma para que tenga el mismo largo que tu almohada. Introduce tanto la cuña como la almohada en la misma funda para mantenerlas juntas en la posición correcta.

Step 3

Haz una almohada anti-ronquido mientras viajas o acampas, rellenando una bolsa de ropa para lavar o una bolsa de compresión con ropa. Enrolla una prenda dura como un par de vaqueros y colócala en primer lugar, hacia el frente. Pliega o enrolla los artículos para crear una superficie pareja sin protuberancias y que reduzca las arruglas de tu ropa. Prueba la almohada y agrega o retira prendas según sea necesario para obtener el calce correcto. El objetivo es crear una almohada que se parezca a las almohadas con forma de apoyo cervical que dan soporte a tu cuello y abren tu garganta. También son útiles si tienes los orificios nasales y los senos tapados.

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