Prevenir la deformación de las puertas

El sitio web Doorlandia explica que la deformación y la hinchazón de las puertas ocurre cuando una fuente de calor se coloca muy cerca de la puerta o cuando la puerta se encuentra en un lugar de poca ventilación. Como el calor hace que la puerta se expanda contra su marco, evita colocar calentadores a menos de 36 pulgadas (90cm) de una puerta. Si la deformación ocurre, puede repararla quitándola del marco y colocándole una pesa encima para que recupere su forma. Puedes hacer esto usando herramientas básicas de carpintería como limas, burros de cortar, ganchos en forma de C y pesas.

Encontrar deformaciones

Una puerta puede deformarse en los bordes o en el medio. Para determinar la mejor forma de repararla, necesitarás encontrar el lugar de la deformación. Si la puerta no abre o no cierre bien, puedes asumir que está hinchada contra el piso, contra el marco o contra el techo. Para encontrar la parte deformada en el centro de la puerta, coloca una cinta de medir contra la puerta y déjala colgar hasta el piso. No debería haber ningún espacio entre la cinta y la puerta.

Reparar tu puerta

Quita la puerta usando un destornillador y un martillo para desarmar las bisagras. Trabaja con cuidado, no querrás doblar los componentes de las bisagras. Una vez que quites la puerta y sepas el lugar de la deformación, usa una lima para madera para eliminar tanta madera como necesites para que la puerta abre y cierre correctamente, y usa pintura y barniz para cubrir la parte que lijaste. Según la página Home Tips, también puedes reparar una puerta doblada añadiendo una tercera bisagra entre la superior y la inferior.